Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- Cerca de las 8:00 de la noche de este jueves, el funcionario retirado de la GNB, Yesim Linárez, se quitó la vida en una celda del Destacamento 121 de la GNB, ubicado en la avenida Morán de Barquisimeto, donde permanecía bajo custodia por un caso de tortura contra Hernis Rivero, en Siquisique, municipio Urdaneta.
De acuerdo al parte policial, el cuerpo de Linárez fue hallado colgando de los barrotes del techo con una sábana que ató a su cuello. Su esposa, Luz Celeste Carrera permanece detenida por averiguaciones y su complicidad en torno al hecho, el cual fue grabado y colgado en las redes sociales.
Más temprano, se conoció que el fiscal 21, con competencia en Protección de Derechos Fundamentales, visitaría Siquisique para realizar algunas investigaciones sobre el caso.
El abogado de la víctima contó a LA PRENSA que Hernis fue llevado al servicio médico forense para chequeos y luego que detuvieron a Linárez y su esposa, el fiscal lo contactó para informarle que hoy estarían visitando el municipio para así recaudar más información en las investigaciones. Se estima que la audiencia de presentación podría llevarse a cabo entre hoy o el sábado.
El miércoles en la mañana, la víctima junto con su abogado Carlos Pire denunció al exmilitar, quien lo habría secuestrado y torturado por tres horas en su vivienda, ya que este lo consideraba sospechoso del hurto de un reproductor y batería que sufrió su vehículo.
El miércoles en la noche, el fiscal general Tarek William Saab, detalló que a la pareja se le imputaban los delitos de: tortura, privación ilegítima de libertad, uso de niño para delinquir, apología al delito y agavillamiento.
La víctima fue atendida en la Fiscalía superior del estado Lara, donde denunció las agresiones que sufrió y debido a la brutal golpiza lo dejó convaleciente por 4 días.
La víctima, durante su denuncia contó que este hecho sucedió el pasado jueves 22 de julio cuando retornaba de su trabajo, supuestamente, el exsargento le pidió que se montara a su vehículo. «Le pregunté para dónde íbamos y él me dice que para allí, me monté confiado porque él nos despacha mercancía», comentó Hernis.
El joven detalló que fue llevado al Barrio Cruz Alta, dentro de la vivienda habría comenzado los golpes por todas partes de su cuerpo y el exmilitar le decía que estaba metido en un robo y él era un sospecho.