Holiancar Contreras | LA PRENSA DE LARA.- Las semanas radicales han devastado los comercios que hacen vida dentro de las instalaciones del Terminal de pasajeros de San Cristóbal, dejando prácticamente sin ganancias a los pocos negocios que aún permanecen abiertos.
Francys Moreno, suele vender papas rellenas en el terminal, durante las semanas radicales solo logra vender una o dos de las diez que lleva para vender, «las semanas radicales son súper solas, pierdo mercancía, me toca llevar más de la mitad de lo que traigo».
«Si el terminal no mueve gente, uno puede vender nada y a veces uno viene las semanas radicales como por no quedarse en la casa sin hacer nada», así lo dijo Mario Parra, quien manifiesta su frustración en cuanto a las pocas ventas que logra realizar las solitarias semanas radicales, las cuales no le generaron mayores ingresos a su pequeño negocio de golosinas.
Asimismo, comerciantes expresan que el cierre de varias entradas y salidas a las instalaciones del terminal, es otro factor que también los ha perjudicado, pues con este cierre es menor la cantidad de personas que ingresan al lugar.
En el caso de Sinday Salcedo, es lo contrario. Ella es encargada de una pequeña empresa de encomiendas dentro del terminal y expresa que son más los envíos que circulan durante semanas radicales que flexibles, «hay semanas en las que por día mando o me llegan una o dos encomiendas, eso siempre varia».
Según Eleazar Castro, otro de los comerciantes consultados cuenta que «el terminal prácticamente no labora las radicales, y el horario de 6 de la mañana a dos de la tarde no funciona tampoco, ya no se generan ingresos en lo absoluto».
Puertas cerradas
Distintos cuerpos de seguridad han tomado la iniciativa de cerrar algunas vías de acceso al terminal de San Cristóbal, con el fin de mantener el cumplimento de las medidas de bioseguridad.
Así lo informo Patricia Chacón, Directora del Terminal de Pasajeros de San Cristóbal, quien a su vez destacó que la eliminación temporal de las rutas largas, ha contribuido al poco tránsito de pasajeros.
Además del terminal de pasajeros «paralelo» que actualmente funciona en Abejales, del cual salen rutas hacia otros estados del país, «ahora las líneas paralelas, también han disminuido la cantidad de pasajeros, lo que afecta a los comerciantes porque entonces a quien le venden, si ya poca gente ingresa al terminal».
Estos comerciantes esperan que sean abiertas las vías de acceso y que se renueven las rutas largas, lo que permita que se genere mayor afluencia de pasajeros y ellos puedan retomar sus ventas como de costumbre.
Fuente: