Joelis Sosa | LA PRENSA.- En La Sábila continúa la inseguridad a flor de piel. Los vecinos del sector se aferran a Dios para que nada les pase, pero no se salvan de los constantes robos.
El sector ha sido catalogado como “zona roja”. Desde hace años muchas familias se han visto afectadas por los “azotes de barrio”. Algunas de ellas aún se mantienen en el sector pero otras han optado por irse y vender sus casas “a dos lochas”. Nadie quiere vivir en el llamado “infierno”, a pesar de que muchos de los que vivan en el sector estén ligados a religiones, pero no se salvan.
Comentan vecinos que la manzana más peligrosa es la M, donde ya no hay nadie viviendo allí, pues las casas fueron desvalijadas poco a poco.