Joelis Sosa | LA PRENSA.- Echando carreras a Barquisimeto, así se ponen los residentes del caserío La Fundación de la parroquia Águedo Felipe Alvarado cada vez que se les presenta una emergencia o se enferman debido a que no cuentan con el espacio ni los médicos para poder recibir atención.
Sólo tienen los equipos médicos que están guardados llevando polvo. “Mi hermana murió hace tiempo por una picada de avispa, ya que no fue tratada a tiempo porque no tenemos un centro de salud aquí”, explica Elizabeth Paez, quien reseña que han sido muchas las personas que se las han visto muy difícil por esta situación.
Páez comenta que por medio del consejo comunal San Rafael Arcángel han solicitado una solución a esta problemática, porque hace diez años una familia donó un espacio para el funcionamiento del centro de salud pero ahora lo están pidiendo de vuelta.
“Ya está viviendo allí un nieto de la señora Torres, así no puede funcionar un consultorio”, rezonga. Esta casa fue acondicionada por los mismos miembros del sector para que funcionaria el consultorio médico, allí están todos los equipos que fueron recibidos por medio de un presupuesto participativo que otorgó la alcaldía del municipio Iribarren hace diez años.
Entre los implementos hay camillas, sillas de rueda, peso para niños y otro de adulto, tensiómetro, escritorios, lámparas y otros que no han sido utilizados ni la primera vez por falta de médicos en la zona.
Residentes del sector exigen que les envíen médicos y le acondicionen un lugar para poner a funcionar el consultorio médico porque en el sector hay muchos niños y personas que presentan discapacidad y para ellos es difícil sacarlos al médico porque un traslado hasta la ciudad de Barquisimeto les sale como tarifa mínima 10 mil bolívares.