EFE | LA PRENSA.- Un grupo de jóvenes venezolanos hijos de portugueses inmigrantes en Venezuela asiste hoy a la misa del papa Francisco en el santuario de Fátima para pedir a la Virgen que lleve la «paz» al país latinoamericano y al pontífice que medie para que se abra un corredor humanitario.
Colocados en primera fila y con una enorme bandera venezolana con el mensaje «Virgen de Fátima te pido libertad para Venezuela», estos cuatro jóvenes se encuentran desde ayer en el santuario y han pasado toda la noche en la explanada para conseguir un buen sitio.
Jose Antonio Do Santos es hijo de inmigrantes portugueses, nacidos en Fátima, y hasta hace unos años vivía en Venezuela, pero emigró a España para huir de la crisis en su país.
Como devoto de la virgen de Fátima también estuvo en el año 2000 en este santuario, cuando Juan Pablo II beatificó a los pastorcillos Jacinta y Francisco, que hoy serán canonizados por el papa argentino.
«Las visiones proféticas de la Virgen hablaban de conseguir la paz y por ello he venido hoy aquí para pedirla para Venezuela en este momento», explicó Do Santos a EFE.
Ha venido con otros tres amigos originarios de Madeira y que también vivieron en Venezuela hasta hace poco y que aseguran que «sus familiares que se han quedado allí están pasándolo muy mal».
Durante esta ceremonia aseguran que también pedirán al papa, cuando pase por su lado en el «papamóvil», que «interceda como autoridad y figura importante para, al menos, abrir ahora un canal humanitario de medicinas y alimentos».