Cristina Linárez | LA PRENSA.- Estudiantes de la UPEL que esperaban tener una reunión con la asociación de docentes de esta universidad se quedaron esperando que les dieran la cara, porque ninguno de estos hizo acto de presencia, para hablar sobre el “horario crítico” que vienen realizando desde que comenzó el semestre y esto afecta a los estudiantes, ya que no todos lo cumplen.
Jairo Chirinos, uno de los estudiantes que estuvo presente en la asamblea, manifestó molesto que “los profesores no nos quisieron dar la cara, nos dejaron esperando”. Comenta que lo que la mayoría de los estudiantes quiere es que los docentes aclaren el tema sobre el horario crítico, (con el cual los docentes sólo dan clases dos días a la semana), el problema radica en que no todos los docentes acatan esto, y muchos hacen evaluaciones aun cuando no está la mayoría de los estudiantes en el aula de clases.
Chirinos resalta que los estudiantes se sienten atropellados por los docentes, que les están violando sus derechos. “Queremos que nos expliquen o que tomen otras medidas, porque nosotros no tenemos la culpa de sus problemas salariales.
El grupo que inició el llamado al cese de actividades por estos días como medida de presión para tener una respuesta por parte de los docentes, posiblemente siga con estas acciones hasta que reciban una respuesta.
Sin embargo, respecto a estas acciones, un grupo de estudiantes no están de acuerdo. Génesis Escobar, otra estudiante consultada, manifestó que no apoya a los que están haciendo el llamado al cese de actividades, porque eso genera más atraso.
“A mí sólo me falta un semestre para terminar mi carrera, no es justo que tenga que atrasarme por eso que hace un grupo de estudiantes”, expresó.
Además dijo que los estudiantes deben ser conscientes y pensar que si no hay clases no podrán avanzar, y “así no se construye un país”. Resaltó que a pesar de que la universidad posee muchas carencias, tienen lo necesario para continuar y ahora más, con la apertura del comedor, luego de casi tres años que estuvo cerrado por falta de una empresa para el servicio.