Eva Gómez | LA PRENSA.- Pregunta en la panadería y no hay. Va a un agente autorizado y tampoco consigue. Intenta por una transferencia bancaria y no lo logra. Conseguir tarjetas Movilnet para recargar de saldo un celular con esa línea es prácticamente imposible en Barquisimeto y Cabudare.
“Antes compraba tarjetas y ahora no consigo. Desde hace dos meses no he podido recargar”, expresó Marlene Colombo, quien acababa de comprar un “código” en un kiosco por 15 mil bolívares, cuando el monto de la recarga era equivalente a 10 mil bolívares. La usuaria de este servicio del Gobierno nacional explica que tenía ese precio porque lo pagó por punto de venta, lo que obliga a los usuarios a pagar más de lo que consumen.
Pagar la renta se ha convertido en casi una tarea de sufrimiento para los usuarios Movilnet, cuando hasta hace algunos meses era una “mandarina pelada”, porque no se consiguen las tarjetas telefónicas. Los guaros aseguran que pueden pasar hasta un mes sin saldo porque no tienen tiempo para recorrer diferentes locales, hasta encontrar uno donde le ofrezcan este servicio.
Según trabajadores de las agencias Movilnet, las tarjetas telefónicas desaparecerán y advierten que además de la ausencia de equipos en los locales tampoco prestan el servicio de recargas de saldo para la telefonía móvil.
El encargado de una agencia en el centro de Barquisimeto explicó que las recargas ahora serán exclusivamente a través de un código que puede ser solicitado y cancelado directamente en la página web de Movilnet por los distribuidores.
“Se me venció el plan el viernes y hasta hoy martes fue que pude conseguir, me caminé la avenida Vargas y no conseguí, hasta que me dijeron que aquí lo hacían”, dijo Colombo.
Por su parte, Marcos Cordero, quien tiene un kiosco en el centro, también vende los “códigos” de recargas Movilnet. Él explica que cobra 2 mil bolívares por encima del valor de la recarga porque le da mil bolívares al distribuidor que se los lleva y él se queda con mil. “No me alcanza ni para un caramelo, pero lo hago para mantener a los clientes”, añade.
Detalla que ese proceso anteriormente lo hacía Movilnet, pero que las tarjetas telefónicas cuestan más por la impresión que por lo que se va a recargar de saldo.
Los buhoneros que también ofrecen estos códigos, expresan que como no tienen punto de venta se les complica, porque la gente no tiene dinero en efectivo. Los “códigos” en efectivo también se venden con 2 mil bolívares de más, el vendedor alega que sólo se queda con 500 bolívares que no le generan ganancias.