Osman Rojas | LA PRENSA.- El miedo de la malaria y la difteria se sembró en el estado. Aunque los boletines epidemiológicos digan que la tierra de los crepúsculos no ha sido afectada por ninguna de estas patologías, las noticias que circulan a nivel nacional tienen bien atenta a la población larense.
“Tengo dos días visitando el ambulatorio de Andrés Eloy y todavía no ha llegado la vacuna allí. Siento que están discriminando al oeste y lo que más preocupa es que nadie nos da la cara en los centros públicos”, comentó Gisela Carrasco, madre de un pequeño de cinco años.
La mujer asegura que, desde que en la escuela donde tiene a su hijo empezó a circular una cadena sobre los casos de difteria que hay en Venezuela, ella empezó a buscar el tratamiento biológico. Dos semanas han pasado y la mujer sigue sin vacunar a su hijo.
Este lunes, el Gobierno nacional anunció megajornada de vacunación para atacar los casos de difteria y malaria en Venezuela, Lara no aparece entre los estados con prioridad por ser una zona “libre de contagio”.
La decisión tomada por las autoridades nacionales ha generado malestar en la población y es que, la mayoría de larenses, sienten que son discriminados. “Nosotros también vivimos en Venezuela”, dijo Carrasco.