Luis Montes de Oca | LA PRENSA.- Los rellenos para las arepas están por las nubes. Un diablito pequeño ronda los 16 mil bolívares, mientras que un kilo de queso alcanza los Bs. 37 mil, por lo que los guaros se ven en la necesidad de apartarlo y comer otros alimentos o ponerle menos relleno.
Ante los altos precios que presentan los acompañantes del plato tradicional venezolano, hay quienes están usando granos, plátano y yuca como sustitutos de la arepa, pues no requieren de rellenos.
Desde el inicio del mes de octubre los ciudadanos aseguran que en los establecimientos comerciales los productos han pegado un brinco en los precios, lo que ha generado un freno en las compras. Luis Hernández, quien trabaja en un supermercado al este de Barquisimeto, comentó que el hecho de trabajar en un comercio ve las necesidades que la gente pasa a diario. Relató que muchos son los que llegan a comprar y cuando ven los precios dejan el producto en los anaqueles. “Los precios en una semana se elevaron de manera descomunal y la gente no se los lleva como antes”, expresó.
Los ciudadanos consultados afirmaron que en ocasiones deben hacer el sacrifico y comprar por lo menos uno de los productos para brindarle el desayuno a sus hijos. La mantequilla y la Rikesa se han convertido en los aliados de los padres, aunque el valor no es muy asequible lo utilizan para que les rinda más que otros productos alimenticios.
Otra de las alternativas que han puesto en práctica los guaros para lidiar con los precios de los rellenos es la compra de pocos gramos. Los ciudadanos comentan que adquieren entre 150 y 250 gramos de jamón, mortadela o queso para resolver parte de sus comidas.
En mi casa casi todas las noches tratamos de resolver con lo que tengamos de dinero, compramos un poquito de cada uno”, expresó Douglas Carrasquel, quien trabaja como transportista para la zona norte de Barquisimeto.
En un recorrido que realizó el equipo de La Prensa por distintos establecimientos comerciales se constató lo relatado por los ciudadanos. Donde un huevo llega a costar los Bs. 1.500, un kilo de jamón alcanza los 73 mil y un paquete de salchichas de 24 unidades llega a costar 54 mil bolívares.
Los mismos consultados aseguran que los días de cobro de sueldo son los más esperados, porque pueden adquirir cierta cantidad de estos productos y se pueden comer una arepa “bien resuelta”, pero al pasar los días la calidad va mermando hasta el punto que tienen que sustituirlo por otro alimento, porque los churupitos simplemente no les alcanza para los rellenos, que aseguran que en años anteriores podían comérselos sin ningún inconveniente.