Jesús Pérez | LA PRENSA de Lara.- La representante de Venezuela ante República Checa, Tamara Sujú, denunció la muerte del Capitán de Corbeta de la Armada, Rafael Acosta Arévalo, quien se encontraba detenido desde el 26 de junio.
Según los detalles emitidos por Sujú, Arévalo fue presentado el pasado viernes ante Tribunales en silla de ruedas y evidenciaba signos de «tortura«.
Incluso tenía dificultad para hablar; «No hablaba, solo pedía auxilio a su abogado. No entendía ni escuchaba bien, podía ponerse de pie pero no moverse» acotó Sujú.
La diplomática opositora hizo responsable al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro e Iván Hernández Dala, director de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM).
«El capitán habría confirmado asistiendo con la cabeza a la pregunta de si fue torturado por la DGCIM«. El caso será llevado por Sujú ante la Corte Penal Internacional.& ;