Eduardo Soteldo | LA PRENSA de Lara.- El hambre, la insalubridad, falta de asistencia médica y el retardo procesal desataron una situación irregular en el Centro Penitenciario de la Región Andina (CEPRA), estado Mérida, donde los rehenes secuestraron a dos custodios para presionar a las autoridades a que cumplan con sus exigencias.
Los oficiales del recinto han lanzado bombas lacrimógenas a los presos ya que se «se subieron al techo con los custodios y tomaron la parte administrativa», informó el Observatorio Venezolano de Prisiones en su cuenta de Twitter.
Aunado a la exigencias de comida y atención médica, solicitan ver a sus familiares con los cuales no han logrado contactar desde que se inició la cuarentena social y colectiva en Venezuela por la pandemia del coronavirus, exactamente, el 13 de marzo.
«Los presos del #CEPRA claman por comida, medicinas y noticias de sus familiares, a quienes no ven desde el inicio de la #CuarentenaObligatoria. Les están lanzando bombas lacrimógenas, pues se subieron al techo con los custodios y tomaron la parte administrativa», informó el Observatorio.
La ONG reveló información sobre el centro penitenciario, donde estarían recluidos 1200 reos, cuando la capacidad es de 750.& ;
Por los momentos, las autoridades nacionales no se han pronunciado sobre la toma de la cárcel de Mérida.& ;
Sería el segundo motín en cárceles venezolanos, luego de la masacre en Cepella, penal de Guanare, estado Portuguesa, donde murieron 47 reos que supuestamente, se alzaron por alimentos, otros tantos terminaron heridos. El Ministerio Público lleva las investigaciones sobre este caso.
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