Agencias | LA PRENSA DE LARA.- Como Ángel Gil Pérez fue identificado el joven venezolano que murió el pasado 9 de agosto al ser atropellado por un camión en la provincia de Pacasmayo, Perú.
Gil Pérez, de 20 años de edad, llegó a Perú con la premisa de trabajar y estudiar. Desde el primer día se ganó el cariño y el aprecio de las personas, pues con lo poco que ganaba como delivery alimentaba a los perros de la zona.
Su nombre se popularizó cuando adoptó a una perrita, a quien llamaba «fresita», que no se separaba de su lado. Ambos vivía en la urbanización Nicolás Garatea, en Chimbote.
El joven fue sepultado el pasado sábado. Un diario local reseñó que amigos del joven en Chimbote iniciaron una campaña de ubicación de la pequeña Fresita.
Los grupos rescatistas de perritos de Chimbote, están pidiendo apoyo a sus compañeros de la región de La Libertad para conocer la situación de la mascota.
Fuente: El Nacional