Jennifer Orozco | LA PRENSA.- Se encontraron en la encrucijada de El Trapiche y el choque fue mortal. Un joven conductor, presuntamente en estado de ebriedad, se quedó dormido con el pie en el acelerador y chocó contra otro vehículo, donde viajaban dos hombres que murieron en el sitio.
Eran las 6:00 de la mañana de ayer y Franklin Betancourth (25) encendió su carro Renault 12, año 89 y arrancó a trabajar como todos los días en la Línea San Rafael, como rapidito en la vía de El Trapiche de Tamaca. Como pasajero a las 6:30, en el asiento del copiloto se subió Alejandro Navas (38), quien iba a su trabajo en una frutería en Romeral.
Cuando eran las 7:00 de la mañana Franklin y Alejandro iban por la vía que conduce de El Cují hacia Romeral. Mientras tanto un joven conducía una Eco Sport plateada. Según versión policial la camioneta iba a exceso de velocidad. Cuando el Renault tuvo su paso en la encrucijada de El Trapiche la Eco Sport lo impactó fuertemente, pues su conductor no tuvo chance de reaccionar.
El golpe fue estruendoso. El Renault azul eléctrico dio tres vueltas sobre su eje y terminó montado sobre la isla, mientras que la camioneta quedó a 100 metros de donde chocó al carrito. Franklin y Alejandro salieron expelidos por las ventanas del Renault y murieron en el sitio, ambos por traumatismos craneoencefálicos.
De la camioneta, por las ventanas, lo único que salió fueron dos botellas, una de ron y otra de vodka, vacías y un vaso fucsia plástico con olor a bebidas alcohólicas.
De la Eco Sport se bajaron tres chamas corriendo en sentido hacia la urbanización Yucatán, “que no pasaban los 18 años”, dijeron los testi
gos, con vestidos cortos, descalzas y gritando. El chamo que iba de copiloto también salió corriendo, dejando al chofer responsable solo dentro de la camioneta.
El muchacho, según testigos, se bajó desorientado y llevándose las manos a la cabeza, al ver cómo había quedado la Eco Sport y más aún
cuando vio cómo quedó el vehículo que chocó. Se asomó a ver los cuerpos y trató de huir, pero la comunidad lo detuvo y estuvieron a punto de lincharlo.
En pocos minutos llegó una patrulla de la Policía Nacional Bolivariana, quienes detuvieron a Jean Carlos Angulo de La Torre (23), conductor de la camioneta, quien según reporte policial, presentó positiva la prueba de alcoholemia. Estaba en estado de ebriedad y al parecer se había quedado dormido tras el volante.
Mientras tanto, otra comisión de la PNB comenzó el levantamiento del accidente. “Levanten rápido antes de que llegue La Prensa”, repetía
desde la patrulla el muchacho detenido.
Los cuerpos de Franklin y Alejandro, fueron trasladados primero al ambulatorio de Tamaca, certificando su muerte. Jean Carlos también fue llevado al mismo centro de salud, pues presentó un golpe en la cabeza y otro en la cara.
“Se lo llevó una patrulla de Polilara a toda mecha”, dijo una familiar de Franklin en la morgue, quienes aseguraron haber tomado las botellas, el vaso y fotos del accidente, con las cuales irían a fiscalía a exigir que Jean Carlos quede preso. Franklin tenía años trabajando en la ruta y era primera vez que sufría un accidente. Alejandro era de Duaca.