Un sexagenario identificado como José Francisco Bastidas durante la tarde del domingo se disponía a visitar a su hijo en el barrio Valle Dorado, parroquia Ana Soto y cuando iba atravesando la vía, justo en la entrada del kilómetro 8 hacia Quíbor, fue arrollado por una buseta Encava. Los politraumatismos fueron tan graves que murió a las pocas horas de estar intubado en la emergencia del hospital central Antonio María Pineda.
Una nuera de la víctima confirmó que tenía 65 años de edad y estaba residenciado en Carora. Se encontraba pasando estos días decembrinos con su familia en Barquisimeto y en ese momento se dirigía a casa de su hijo. Ese tramo es oscuro y sospechan que pudo ser una de las causas del accidente.
Cuenta que los llamaron a los pocos minutos, ocurrió aproximadamente a las 7:00 pm y llegaron al lugar, consiguiéndolo consciente con un traumatismo craneoencefálico abierto y sangrando mucho. Lo trasladaron al hospital del seguro social Pastor Oropeza y debido a la gravedad, fue referido al central.
Al volver, el sexagenario estaba muerto
Allí estuvo muy nervioso, estaba alterado. Los familiares piensan que se debió a que estaba sangrando. No colaboraba, costó para que le pusieran la vía para el tratamiento endovenoso. La nuera recuerda que al final lograron intubarlo y los médicos les indicaron que buscaran un tratamiento. Lamenta que al regresar, ya estaba muerto, deducen que pudo sufrir un derrame interno que comprometió órganos vitales. La familia apenas tenía tres meses de superar el luto, porque la esposa de Bastidas murió de cáncer y eso lo afectó emocionalmente. Tenían 40 años de matrimonio.