Anaís Mendoza | LA PRESA.- El padre estaba claro de que Isaac José López López (18) no andaba en buenos pasos y por eso le aconsejó, en repetidas oportunidades, que dejara la delincuencia. El señor José Gregorio hasta usó sermones cristianos para alejarlo del mal, pero no logró sacarlo de ese mundo, pues el chamo fue asesinado de un disparo mientras se robaba un cable de teléfono del barrio La Apostoleña.
“Cada vez que lo veía le decía que dejara los malos caminos; pero él no me respondía, no hacía caso, se quedaba callado”, recordó el padre de la víctima horas después del crimen.
Según comentaron los vecinos, Isaac llegó el lunes en la madrugada junto a unos chamos a, supuestamente, robarse los cables de la comunidad, pero al parecer, un vecino le disparó en el costado izquierdo y quedó muerto en el sitio.
“Buscó morir de esa manera”, comentó con serenidad su padre, quien sospechaba que a su muchacho algo malo le podía pasar, aunque precisó que no sabía si consumía droga o robaba. De hecho, en el sitio del suceso La Prensa supo que a un grupo de malandrines ya los habían “fichado”, cuando los pillaron intentando robar los cables y quizás esa noche los cazaron y les dispararon.
Cuando el padre del joven se enteró de su muerte expresó que hasta consejos cristianos le había dado, pero Isaac evadía las palabras que él mismo le decía.
El joven dejó de estudiar cuando apenas era un niño y comenzó a andar en la calle.
Le gustaba las rumbas, así lo hacía mostrar en las redes sociales, se la pasaba tomando. Se vestía bien y también le gustaba lucir sus tatuajes.