LA PRENSA DE LARA | Agencias.- Un disparo de escopeta acabó con la vida de Yalfred Martínez, un hombre de 24 años de edad, quien se encontraba en una fiesta clandestina en el sector Nuevo Horizonte, en Catia, cuando participó en una pelea en defensa de su hermana, que estaba siendo agredida por el sujeto que terminaría siendo su asesino.
A las afueras de la morgue de Bello Monte, familiares de Martínez relataron a Caraota Digital que este era un hombre sumamente querido en el sector. Jugaba fútbol en un equipo del barrio, y dejó a un hijo de nueve meses a cargo de su madre. Esta, quedó destruida anímicamente por el suceso.
El hecho tuvo lugar en medio de una fiesta clandestina, que están prohibidas en el territorio nacional por la pandemia de la COVID-19. La víctima se percató que un sujeto estaba agrediendo a su hermana y de inmediaton se acercó al lugar de los hechos para confrontar al presunto agresor.
En medio del tenso momento, el sujeto tomó una escopeta y le propinó a Yalfred un disparo en el brazo para después escapar del sitio.
A la víctima la llevaron al Hospital General Dr. José Gregorio Hernández, mejor conocido como Los Magallanes de Catia, pero murió desangrado antes de poder entrar a la sala de quirófano.
«Allí fue muy difícil que lo atendieran, porque como es público y notorio, muy pocos hospitales cuentan con los insumos necesarios para recibir casos de emergencia como este», señaló un familiar de la víctima a Caraota Digital, quien prefirió no identificarse ante las cámaras.
Según testigos presenciales, quienes conocen al agresor, se trata de un sujeto que recientemente salió de la cárcel. Al parecer, retomó la vida delictiva y manteniendo azotados a los vecinos del sector.
Funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) continúan las averiguaciones, para poner al responsable de este suceso tras las rejas.
Fuente informativa: .