Euseglimar González | LA PRENSA.- Los cinco presuntos delincuentes asesinados el domingo por la furia de los pobladores del caserío El Cascarrón, en Morán, habían llegado el sábado desde Villa de Cura, en Aragua. Al parecer se hicieron pasar por obreros para robar a su jefe.
Reynaldo Antonio Mendoza Mendoza, de 24 años, y Franklin Javier Diepa Ramírez, de 32 años, sufrieron golpes con objetos contundentes; mientras que Carlos Elías Mendoza Da Costa, de 27 años, recibió múltiples puñaladas; Melwin Núñez, murió por una descarga de escopeta en el tórax y Darío Lacruz, a causa de herida en cráneo y descarga de escopeta en la pierna. El múltiple crimen ocurrió en la vía hacia Agua Amarilla, de la parroquia Hilario Luna y Luna.
Carlos y Reynaldo eran primos, al igual que Franklin y Melwin, mientras que Darío era cuñado de Franklin.
Este es el segundo caso de linchamiento en Morán en menos de un mes. El 6 de diciembre fueron linchados dos presuntos azotes en La Pastora. La comunidad arremetió en contra de ellos porque estaban “cansados” de que los robaran a cada rato. Los muertos fueron identificados como el “Royers” y el “Álvaro”.
Doce días después, los 5 presuntos hampones viajaron desde Villa de Cura, Aragua hasta Morán. Según el relato de vecinos, quienes no quisieron identificarse, los hechos sucedieron luego de que vieron cómo se llevaban sometido a un agricultor.
Al ver pasar a dos de los delincuentes con la camioneta en el caserío Santo Domingo, al menos doce motorizados esperaron a los choros, quienes llevaban secuestrado al propietario de una camioneta Toyota. Luego de rescatar al agricultor, los hampones salieron corriendo, pero fueron alcanzados por la comunidad enardecida y comenzaron a golpearlos. Los cadáveres quedaron en plena vía.
La comunidad comenzó a buscar a los otros delincuentes. Cuentan que trancaron las vías que dan hacia La Laguneta y caseríos aledaños al sector El Cascarrón para evitar la fuga de los cómplices. Después de unas horas, encontraron a los otros tres y los lincharon en la carretera del poblado.
Familiares estuvieron ayer en la morgue del Hospital Central y contaron que ellos “no eran delincuentes”.
La esposa de Franklin contó que él salió el sábado a las 5:00 de la mañana de Aragua porque iba a trabajar recogiendo café en Lara.