Víctor A. Rodríguez | LA PRENSA DE LARA.- Con la medalla de oro en el Mundial de Atletismo de Oregón en el bolsillo, la venezolana Yulimar Rojas expresó la emoción por otro logro en su carrera y se lo dedicó a todo el país, a su familia y su equipo de trabajo.
«Estoy contenta y tranquila, sin molestias. Ha sido una victoria completa en salud, trabajo, compromiso, en pasión. Una victoria para el deporte, para Venezuela, para mi equipo de trabajo, para aquellos que creen en mí y que nunca han dejado de luchar conmigo», destacó la ahora llamada «Reina del Salto Triple».
Volvió a hacer historia tras conseguir su tercer título consecutivo en un mundial a cielo abierto (Londres 2017, Doha 2019 y Oregón 2022), y su sexto sumando los otros tres en pista cubierta (Portland 2016, Birmingham 2018 y Belgrado 2022).
Con esto se convirtió en la primera mujer que logra tres títulos en un mundial de manera consecutiva.
«Poder conquistar este título es increíble. Estoy disfrutando de cada momento que Dios me da y cada bendición que hay en mi vida. Esto es un ejemplo para sobreponerse a las circunstancias, las lesiones, a lo que digan o crean de ti. Si tú vas por tus sueñ;os los puedes conseguir».
Yulimar poco a poco se está metiendo entre las leyendas del atletismo, esta vez ingresó al selecto grupo de deportistas con seis títulos o más.
Algunos nombres como: el británico Mo Farah, dominador del fondo (carrera de larga distancia), quien posee seis títulos mundiales. La misma cantidad de medallas de oro las logró el ucraniano Sergéy Bubka en el salto con garrocha y el considerado como uno de los mejores corredores en velocidad de la historia, el estadounidense Michael Johnson.
Apenas a sus 26 añ;os de edad, la venezolana se siente muy joven así que la historia puede ser aún más nutrida en los añ;os venideros.
«Todavía estoy en plena juventud. La niñ;a siempre está aquí presente, me gusta recordarla siempre, de dónde vino, de dónde salió. Las penurias que pasó para poder lograr esto, aquel ranchito que se caía, se mojaba, no dormíamos, aquella chica que bajaba de un cerro hasta cuatro veces en el día para ir a estudiar y luego entrenar», dijo Rojas recordando su infancia y adolescencia.
Confesó que no ha tenido el tiempo necesario para entrena