Julián Alvarado | LA PRENSA DE LARA.- El estado Lara ha construido un legado y respeto importante en el levantamiento de pesas a nivel nacional. La tierra crepuscular es reconocida por contar, durante varias décadas, con la presencia de talentosos atletas en esta disciplina deportiva.
Sin embargo, las dificultades económicas en Venezuela durante los últimos añ;os, la falta de apoyo gubernamental, los problemas generados en plena pandemia y la migración de deportistas a otras naciones han contribuido en que los larenses no ocupen los primeros puestos nacionales e internacionales, como se tenía acostumbrado.
Ottoniel Rivero, actual presidente de la Asociación de Pesas del estado Lara y entrenador de la selección nacional, indicó que en los recientes Juegos Suramericanos de Asunción 2022 la delegación venezolana de levantamiento de pesas tuvo una actuación que superó las expectativas al ganar cuatro medallas de oro, cuando se tenían pronosticadas dos preseas doradas. Julio Mayora en 73 kilogramos, Keydomar Vallenilla en 96 kilogramos, Katterín Chandía en 49 kilogramos y Johana Sanguino en 102 kilogramos fueron los mejores en sus categorías.
A pesar de estar contento por el resultado del equipo venezolano, Rivero no se ciega y es consciente de muchas fallas que no permiten el crecimiento de la disciplina. «Algunos estados tienen otra realidad y cuentan con más apoyo para las asociaciones y por supuesto para los deportistas. Pero la actualidad en Lara causa preocupación porque nosotros éramos pilares del levantamiento de pesas; siempre estábamos en el podio con la participación de muchos atletas en todas las categorías».
La innegable crisis económica, social y política que ha padecido Venezuela desde hace añ;os fue golpeando poco a poco la halterofilia. Los entrenadores trabajan más por pasión y amor al deporte que por beneficios económicos. Gran cantidad de atletas no mantienen una alimentación idónea para un deportista de alto rendimiento por la falta de recursos, esto se traduce en menos sesiones de entrenamiento en la semana y una merma en los resultados de las competencias.
Al ser una actividad que depende de grandes esfuerzos físicos, constancia y arduo trabajo diariamente. No contar con una buena nutrición es determinante. Además, a algunos pesistas les cuesta ir a todos los entrenamientos por la falta de pasaje.
«Un atleta de alto rendimiento debería entrenar mañ;ana y tarde. Pero cómo le exiges eso a un muchacho que no está consumiendo el requerimiento calórico y proteico mínimo para un buen rendimiento. Ese es un problema muy grande que estamos presentando. Hay talento, pero ese talento para que dé todo su potencial debemos apoyarlo», indicó Roger Rodríguez, entrenador y coordinador de Comisión de Árbitros en el estado Lara.
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