LA PRENSA DE LARA | EFE.- Los Juegos Olímpicos de París celebrarán su ceremonia de inauguración el 26 de julio de 2024 en el río Sena, una innovación que pretende mostrar un mensaje de democratización, puesto que será gratuita para cientos de miles de espectadores y situar el evento en el corazón de la ciudad.
Así lo expresó el presidente del Comité de Organización, Tony Estanguet, tras firmar este lunes el protocolo que autoriza a que, por vez primera en la historia, la ceremonia inaugural no se celebre en el estadio olímpico.
Estanguet presentó las grandes líneas de la ceremonia en la que los deportistas, en lugar de desfilar por la pista olímpica, recorrerán en 160 barcos las aguas del Sena, que estarán flanqueadas por unos 600.000 espectadores que se sumarán a los que podrán verla a través de la televisión en todo el mundo.
«Por primera vez también serán los deportistas los que abran la ceremonia y no los que la cierren», dijo Estanguet. «Queremos que los deportistas estén en el corazón de los Juegos y proponerles la mejor experiencia», agregó.
La parte baja de las riberas del Sena estará reservada con asientos que se podrán comprar, pero la parte superior será de acceso libre, lo que envía un mensaje de que «la ceremonia de inauguración no es algo cerrado a unos pocos», destacó la alcaldesa de París, Anne Hidalgo.
El desfile comenzará en el puente de Austerlitz, en el este de París, y recorrerá seis kilómetros del río hasta terminar frente a la torre Eiffel, tras recorrer algunos de los monumentos más emblemáticos de la capital francesa.
En paralelo se organizarán espectáculos acrobáticos y deportivos en algunos puntos del recorrido o sobre algunos de los numerosos puentes que cruzan sobre el río.
Los asistentes presenciarán diferentes actuaciones al mismo tiempo que 80 pantallas gigantes permitirán vivirlas de forma más cercana.
El presidente del Comité Organizador señaló que, de esta forma, tratarán de dar ritmo a unas ceremonias que «a veces tienen problemas para mantenerlo».
La alcaldesa indicó que con este «proyecto brillante» de sacar del estadio la ceremonia de inauguración «se envía un mensaje de democratización de los Juegos», aunque indicó que trabajan para que París pueda mandar otros, «de humanidad, de apertura al mundo, de compartir».
«Estos Juegos van a marcar al mundo por la belleza del espectáculo y por la potencia del mensaje que queremos enviar a través de ellos», dijo.