El Alcalde de Barquisimeto Luis Jonás Reyes, sin ningún rubor y actuando como sino quebrara un plato, ha dispuesto meterle la mano en los bolsillos a los Iribarrenses con el cuento de pechar a los industriales y comerciantes por la recolección del aseo urbano con tarifas que no guardan relación con los criterios establecidos en las leyes sobre la materia que bajo ninguna previsión hablan sobre metros cuadrados de establecimientos.
Estas medidas impositivas conspiran contra el poco desarrollo productivo del estado, ya que en otras regiones le dan facilidades a los que se atreven a presentar proyectos de inversión para que se establezcan y generen fuentes de trabajo, en un país en el cual la economía nacional está deprimida por las erradas medidas económicas dictadas por el régimen y que se han consolidado a través del tiempo produciendo una de las hiperinflaciones más alta del mundo y una tasa de desempleo que ha empujado a más de 6 millones de venezolanos al éxodo, muchos de ellos sin destinos ciertos, huyendo de la crisis humanitaria compleja que hay en Venezuela.
De manera que esas alzas indiscriminadas en los servicios públicos en forma selectiva, en este caso el aseo urbano, además de inconstitucional e ilegal va a producir más inflación y alza en los precios de los productos de primera necesidad para los consumidores ya que esos son costos trasladables a los productos finales y quien va a pagar los mismos son las familias más pobres y necesitadas.
Sabemos que por demagogia y época electoral han dicho que esos incrementos no se van a aplicar a las áreas residenciales, pero tengamos la seguridad que eso es provisional mientras pasa la zafra electoral y luego vendrá la conminación para que igualmente paguen los montos que arbitrariamente están imponiendo.
El otro asunto que se deriva de este atraco a mano armada es lo relacionado con la época electoral. Están buscando recursos para financiar la reelección de Luis Jonás Reyes, quien a estas alturas no tiene el favoritismo sin que haya salido el candidato de la UNIDAD, por lo cual el desespero reina por los lados de la carrera 17 con calle 25 de Barquisimeto.
Al final quiero señalar que estos son hechos de corrupción por cuanto están aplicando tasas que no han sido aprobadas por las autoridades competentes.& ; & ;& ;