LA PRENSA DE LARA.- Todos los intentos de diálogo solo han servido para dirimir conflictos políticos y no para el bienestar social de los venezolanos.
El nuevo intento en reanudar el diálogo entre el gobierno y la oposición necesariamente debe establecer una agenda con soluciones para detener la hiperinflación que acabó el salario y pensiones miserables amenazando con destruir también el valor del dólar, reactivar el programa de trasplante de órganos para detener las muertes de niños en el Hospital JM de los Ríos, un sistema de salud pública eficiente para salvar vidas y no caer en las manos de las clínicas privadas que su costo es inalcanzable para los menos pudientes.
También se debe exigir a los países receptores de migrantes venezolanos cesar en el maltrato, desprecio, xenofobia y deportación. Hay que seguir apostando por la liberación de los presos políticos por humanidad, en términos generales hay que garantizar el bienestar social de todos los venezolanos como prioridad.& ;
Pareciera que al Estado solo le importa acumular más poder político sin importarle las violaciones graves de los derechos humanos y garantías constitucionales, el pueblo sigue indefenso sin tener dolientes.
El diálogo que se genere debe ser sincero, sin color político, dónde prevalezca la prioridad en atender a un pueblo paciente y noble que sufre día a día sin ver soluciones para sobrevivir.& ;
Por: Rafael Narváez, abogado defensor de los derechos humanos& ;
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