William Croes | LA PRENSA-. El primer semestre del 2016 estuvo marcado por la protesta. El hambre y las fallas en los servicios básicos fueron los factores que encendieron la mecha de la conflictividad social en la entidad, que según registros del Observatorio Larense manejado por Funpaz, en Lara se produjeron el 20.67% de las manifestaciones a nivel nacional.
Mayo y junio fueron meses de bastante movimiento en la calle. Entre ambos meses se contabilizaron 423 protestas de las 725 manifestaciones que contabilizó la organización en los primeros seis meses del 2016. El repunte estuvo en la alimentación donde se evidencia un fracaso en las políticas de distribución de comida que ha emprendido el Gobierno nacional por medio de los CLAP.
“La alimentación es la primera causa de conflictividad, sólo en junio, se registraron 85 protestas por escasez de alimentos”, expresa Andrés Colmenárez, vicepresidente de Funpaz, quien detalla que en enero se produjeron apenas seis manifestaciones por comida.
En segundo plano se encuentran las protestas por gas. En los primeros cuatro meses se registraron 30 acciones por fallas en la prestación de servicios. Entre mayo y junio los larenses protestaron 74 veces por la carencia del gas doméstico.
Otro factor que encendió la mecha de la conflictividad son las protestas laborales en el sector público. Educadores estadales, nacionales y trabajadores de empresas estatales protestaron 58 veces entre mayo y junio.
Colmenárez expresa que la protesta ciudadana es un mecanismo que se utiliza debido a la poca capacidad de respuesta que ofrecen los tres niveles de gobierno.