José Najul | LA PRENSA.- La Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA) podría declarar una suspensión de actividades, si las bandejas de comida que suplen el servicio del comedor, y que debe proveer el Gobierno nacional, no llegan durante los primeros días de esta semana.
La alerta fue encendida por el propio rector de la casa de estudios, Francesco Leone, y por la vicerrectora académica, Nelly Velázquez, quienes aseguran que, continuar sin alimentos, impactaría críticamente en la población estudiantil. Proponen que sea el Consejo Universitario, que puede ser convocado por el rector en un plazo casi inmediato, que tome la decisión, si las condiciones de abastecimiento no mejoran.
El 60% de los 15 mil estudiantes, que componen la población activa de la UCLA, provienen de municipios o regiones foráneas, y el subsidio alimenticio es fundamental para que puedan sostener su rutina académica.
Continuar las clases sin el servicio del comedor implicaría una muy alta deserción por parte de los estudiantes”, sostiene la vicerrectora Académica.
La última vez que llegaron los alimentos fue el 20 de octubre. El precio de la bandeja, hasta hace poco, rondaba los Bs. 700, pero con el nuevo incremento salarial decretado por el presidente Nicolás Maduro, los contratistas que reparten la comida debieron reformular sus estructuras de costo. Luego de discusiones, el Gobierno aceptó un aumento hasta de mil 80 bolívares por bandeja. Sin embargo, el Estado tiene una mora de 210 millones con el pago de este servicio, sólo en la UCLA. Además, desde el 20 de octubre no envía las proteínas (pollo, carne y demás) y servían las raciones incompletas.