Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- Que parte de los partidos que integran la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), estén llamando a la población a abstenerse en las elecciones regionales y municipales del domingo, evidencia una gran falla que enfrenta en la actualidad la oposición. «Es parte de las cosas que tenemos que resolver, no puede ser que estemos juntos en las luchas que hemos librado en el país y cuando llega un proceso electoral, entonces cada quien hace dibujo libre. Hace falta mucha disciplina en la unidad», expresó Macario González, actual jefe de campaña de la MUD en Lara.
¿La MUD está consciente del ventajismo del Gobierno y de las irregularidades que ha habido en este proceso electoral?
De verdad que en estos últimos 22 años hemos tenido un retroceso y prácticamente hoy vamos a la cola junto con Cuba y Nicaragua en materia de avance político. Estamos en una dictadura, estamos en un régimen autocrático, pero en estas condiciones, por supuesto uno no puede ser tan exquisito como para pensar que en una coyuntura electoral los que tienen el poder Ejecutivo e institucional, salvo el de la Asamblea Nacional, van a ser generosos en un proceso de este tipo. Ese empeño del régimen de aferrarse al poder vitaliciamente lo debemos vencer luchando contra la adversidad, como lo hicieron las generaciones de 1928 y 1958.
¿Está reconociendo la MUD a Nicolás Maduro con estas elecciones?
Ese es un debate que realmente a la mayoría de la gente no le interesa mucho. Nosotros estamos participando, precisamente porque queremos salir de Maduro y estamos utilizando la vía que sería la que normalmente debe usarse para salir de un régimen, de un gobierno. Así han caído las últimas dictaduras en el mundo, por la vía del voto.
Situaciones como la ocurrida en Miranda, donde el CNE recibió la renuncia de Carlos Ocariz, pero no permitió la sustitución del candidato a gobernador en la tarjeta de la MUD, ¿Acaso no es una estrategia para desestimular el voto opositor?
Ahí hay responsabilidad compartida, una de nosotros como factores democráticos, que a sabiendas de todo el comportamiento que mantenemos sobre la conducta del CNE y de la mayoría de sus rectores, tú no puedes darle la ventaja de llegar a última hora, de hacer un trámite. Pero también es cierto que la norma electoral establece que la renuncia, la muerte o la enfermedad que complique la salud de un candidato son hechos sobrevenidos, eso no tiene lapso, por lo tanto el CNE debió aprobar la sustitución. En este sentido, creo que la Comunidad Internacional acá presente estará tomando nota de ese hecho, porque están dejando a un importante sector de electores sin expresar el voto a través de un candidato, porque si bien es cierto que se puede votar cruzado, ese paso es complicado.
¿Qué puede pasar con el gobierno interino después de estas elecciones?
Como parlamentario que soy, considero que hasta que no se resuelvan unas elecciones libres, presidenciales y parlamentarias en Venezuela el gobierno interino debe sostenerse porque tiene una aceptación favorable de la Comunidad Internacional. Su fin lo va a determinar un acuerdo en México.
¿Por qué Juan Guaidó, siendo el líder principal de la oposición, se apartó de la campaña electoral y dejó solos a candidatos del G4?
La conducta de Guaidó de repente no era lo deseable. Un líder como él, por supuesto hubiese contribuido mucho a reanimar la votación, pero tuvo una actitud más bien muy institucional. Algunos pensaban que iba a levantarle la mano a quienes están llamando a no votar, no lo hizo. Está concentrado en un asunto electoral de fondo que va a contribuir mucho a salir de la crisis, que es un acuerdo por elecciones libres presidenciales y parlamentarias. En el camino nos encontramos con esta y bueno las fuerzas democráticas decidieron la participación y estamos en esto porque había que motivar a la gente a volver a confiar en el voto.
¿Qué análisis hace de los partidos de la plataforma unitaria que están llamando a la abstención para este 21N?
Esos partidos ejercieron su derecho a disentir, pero creo que es parte de las cosas que tiene que resolver la oposición democrática en el país. O sea, no puede ser que estemos juntos en las luchas que hemos librado en el país y cuando llega un proceso electoral, entonces cada quien hace dibujo libre. Creo que hace falta mucha disciplina en términos de unidad. En este caso, se añora la MUD que coordinó Ramón Guillermo Aveledo, en la cual existía y se debatía con fuerza, pero finalmente lo que ahí se acordaba, aún con disidentes, se mantenía dentro de lo acordado, la MUD tenía normas de funcionamiento, programas de gobierno que absolutamente todos acataban.
¿Qué reto tiene la oposición luego del 21N? ¿Presionarán por un referendo revocatorio presidencial a partir de enero?
Lo primero que tiene que hacer la fuerza democrática inmediatamente es recomponerse y respaldar sin mezquindad de ningún tipo la lucha que está librando Guaidó, para que se reinstale la mesa de conversación o de negociación en México. Porque no se puede ir a un revocatorio sin una reinstitucionalización del país, porque ahí está de por medio otra vez el tema de las instituciones, una cosa es que adelantemos un revocatorio con el CNE y entonces lo pare el Tribunal Supremo de Justicia, como hizo en el 2016.