William Croes | La Prensa.- Dios no ayudó a los madrugadores. En una nueva avanzada del operativo de la GNB detuvieron a más de 600 personas que hacían colas en establecimientos comerciales de Iribarren y los llevaron, media mañana, al destacamento 121 donde les dieron un sermón antes de liberarlos.
Darlis Túa, una de las detenidas, llegó a las 12:00 de la madrugada a las afueras del Central Madeirense de El Recreo a llevarle una arepa y un café a su hermana que hacía la cola. “Fue cuestión de minutos, no alcancé a darle el desayuno, cuando nos entromparon los guardias”.
Túa relata que llegaron más de 40 efectivos en tres convoyes. Corretearon a todos los que estaban en la cola y los iban metiendo uno a uno en el convoy. Cuentan testigos que las personas que se intentaban liberar, los guardias le daban su toque técnico por la nuca.
La redada se extendió por los comercios más concurridos de Barquisimeto. Peinaron los demás Central Madeirense, la Cooperativa de El Ujano y varios establecimientos de la cadena Farmatodo. “Cuando nos llevaron al patio contamos más de 500 personas, éramos como 600 detenidos y había discapacitados y adultos mayores”, expresa Túa.
A las personas los tuvieron desde las 12:30 de la madrugada hasta las 9:30 de la mañana. Los funcionarios les tomaron nombre, apellido y su número de cédula, y aunque no los reseñaron, les resaltaron que si volvían a ser detenidos en una cola iban a permanecer detenidos por ser “reincidentes”.