Osman Rojas | La Prensa.-Las calles se han convertido en frigoríficos. La carne desapareció del mercado luego de las medidas económicas anunciadas por el presidente Nicolás Maduro, pero en las principales avenidas del estado se observan a personas comercializando la proteína animal sin ningún tipo de permiso sanitario y a un precio muy por encima de los establecido por el Gobierno nacional.
Saray Torres, ama de casa residenciada en El Cercado, explica que por la vía hacia El Cují se consiguen los cortes que no están disponibles en ningún comercio. Molida, mechada, huesos o para guisar, todas están disponibles siempre y cuando las personas tengan los 140 bolívares soberanos (14 millones fuertes) exigidos por los comerciantes.
“Fui con mi esposo y compramos tres kilos para la semana”, confiesa. Cuando se le pregunta a Torres por el establecimiento o el permiso sanitario del hombre para vender la carne, la señora se limita a decir que “estaba en una casa, se veía limpia, pero no sé si tenía permiso. La carne estaba rojita, fresca y no olía mal”.
Otro de los puntos elegidos por las personas para buscar carne es la vía hacia Pavia. Tradicionalmente, el oeste de Barquisimeto ha sido una tierra en donde se comercializa el chivo, pero en los mercados populares armados durante los fines de semana los compradores pueden adquirir proteína animal de cualquier tipo.
“El precio varía, dependiendo de lo que se busca. Solomo casi nunca hay, pero res y molida sí”, dice el señor Jonatan Sira. El hombre asegura que en más de una ocasión él ha ido a buscar carne en Pavia. “Se puede hacer transferencias. No exigen el efectivo”.
Según cuenta Sira, la única medida de higiene que ofrecen estos vendedores es la de refrigerar con hielo las cavas para que el producto no se dañe. “No sé si están vacunadas, pero en las carnicerías tampoco garantizan eso”, esgrime.
Los dos casos expuestos encarnan la realidad que se vive en estos momentos en el estado y es que, a falta de carne en los establecimientos, las personas buscan, como sea, la proteína animal.
Jhonny Colmenárez, jefe de la División de Mercados en Iribarren, reconoce este problema y asegura que en los próximos días los representantes del Gobierno se reunirán con los carniceros para escuchar sus problemáticas y ver cómo hacen para eliminar los intermediarios entre el matadero y el carnicero. “La carne no está llegando y averiguaremos por qué”.
El expresidente del Consejo Legislativo del estado Lara (CLEL) mostró su preocupación por la venta de carne en las calles, pues asegura que nadie garantiza que lo que se esté comprando sea carne o que cumpla con los estándares sanitarios. “Lo normal es que el comercio garantice al consumidor las medidas sanitarias y en eso trabajamos. Nosotros multaremos a quien tengamos que multar y meteremos preso al que sea”, advirtió el dirigente chavista.