Luis Felipe Colmenárez | LA PRENSA DE LARA.- Humberto Prado, comisionado presidencial para los derechos humanos y atención a las víctimas condenó la devolución por parte de Trinidad y Tobago de un grupo de ciudadanos venezolanos que terminaron ahogados en las costas de Güiria, estado Sucre.
Prado expuso que la nación insular actuó sin garantizarle a estas personas el derecho a solicitar asilo y violando el principio de no devolución. Además de haberlo hecho en condiciones altamente peligrosas e inhumanas.
Sostiene que lo que ocurrió no es un hecho nuevo, sino que constituye una práctica reiterada del gobierno trinitense de deportar de manera colectiva a los venezolanos sin importar que ponen en riesgo sus vidas.
A finales de noviembre, fueron deportados 16 menores de edad venezolanos, algunos de ellos sin la compañía de sus padres.
«Este hecho viola flagrantemente el principio de no devolución, el cual es un principio de ius cogens que obliga a los Estados a que no devuelvan a las personas a un país donde sus vidas e integridad personal corren peligro, como es el caso de Venezuela, un país donde se cometen crímenes de lesa humanidad y violaciones masivas de derechos humanos e inmerso en una grave crisis humanitaria» escribió en una nota de prensa.
Por otra parte, expone que Trinidad y Tobago actúa en contra de las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ente que en medio de la pandemia de COVID-19 recomendó a los Estados abstenerse de utilizar mecanismos de detención migratoria y otras medidas como la deportación o la expulsión colectiva que aumenten los riesgos de propagación de la enfermedad y amplíen la situación de vulnerabilidad de las personas.
Prado envió sus condolencias a los familiares y allegados de las personas que perdieron la vida en el peñero que partió desde Güiria al país trinitense el pasado 06 de diciembre.