Agencias | LA PRENSA DE LARA.- Con el proceso de inscripción abierto y la fecha de los comicios cada vez más cerca, el partido opositor venezolano Primero Justicia pidió que se decidiera de forma «urgente» la participación opositora en las elecciones regionales de noviembre, ratificando que la decisión será en «unidad», reseña la Voz de América.
La solicitud la hizo desde Caracas en rueda de prensa Tomás Guanipa, dirigente político que regresó al país esta semana luego de dos años en el exilio, flanqueado por su hermano, el político Juan Pablo Guanipa, y el ex gobernador Henrique Capriles Radonski, quien también ha abogado por la participación electoral.
«Primero Justicia está a la orden de la decisión que tome la unidad con respecto al próximo proceso que va ocurrir el 21 de noviembre. Nos parece fundamental que se tomen decisiones urgente y nosotros queremos decir que Primero Justicia está listo para cualquier eventualidad», indicó Guanipa.
Aseguró que continuarán luchando por «condiciones electorales que permitan que en Venezuela haya elecciones de verdad», pero que no van a renunciar a ver estos procesos como «un mecanismo de rebelión popular».
La oposición venezolana liderada por Juan Guaidó no participó en las elecciones legislativas de diciembre del año pasado y no ha informado si participaría o no en estos comicios regionales.
Sin embargo, un grupo denominado de oposición llamado «Alianza Democrática» presentó esta semana sus propios candidatos a las 23 gobernaciones. El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), realizó elecciones primarias a inicios de mes y ya tiene definido sus candidatos.
Sobre su regreso, Guanipa aseguró que fue una decisión personal y que no obedece a ninguna «negociación». No ha sido el único dirigente opositor que recientemente ha decidido volver del exilio.
Una salida a la crisis
Guanipa recordó que su regreso se da unos días después del inicio de las negociaciones entre las partes venezolanas en Ciudad de México, donde él es parte de la delegación opositora.
El dirigente aseguró que están claros de los «riegos» y «dificultades» que implica el proceso, pero que se deben «abrir caminos» para que los venezolanos «puedan escoger su futuro».
«No somos ilusos, pero entendemos perfectamente que tenemos que hacer nuestro mayor esfuerzo para que podamos encontrar una salida a la crisis más grande que ha vivido Venezuela», indicó.
Explicó que este proceso es distinto a los otros que se han dado porque «hay actores internacionales que antes no estaban» y que van a ejercer un mecánico de «incentivo que puedan ayudar a que esto se de».
Las partes tienen programado volverse a reunir el próximo 3 de septiembre.