Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.- Con el descenso de los casos de COVID-19, el sistema de salud público no debería bajar la guardia en la vigilancia epidemiológica y reactivar los planes de atención integral en centros asistenciales, además de la protección de los pacientes crónicos. Es el llamado del gremio médico para evitar caer en rebrotes de la pandemia y optimizar la asistencia desde los centros primarios, control especializado para evitar repunte de enfermedades que pueden ser prevenibles y la seguridad en dotación de fármacos de alto costo. Riesgo latente que puede condenar a la muerte, a causa de enfermedades que pueden mantenerse controladas.
El detonante es que las autoridades sanitarias estuvieron centradas por la pandemia desde marzo de 2020 y con la disminución de reportes, los especialistas consideran pertinente volver a políticas de salud para paliar las carencias en centros asistenciales. Limitaciones que fueron reflejadas a final de febrero, cuando la Encuesta Nacional de Hospitales (ENH) confirmaba el inicio de 2022 con 44% de desabastecimiento en emergencias de los principales hospitales del país y con la escasez de antihipertensivos a 37%, con riesgos a complicaciones que terminan en decesos por cardiopatías.
En cuanto al desabastecimiento de los quirófanos se ubicó en 70%, evidenciando menos capacidad de realizar intervenciones y presentar 76% de equipos averiados para la realización de tomografías y resonancias magnéticas. Una necesidad perenne para los pacientes, cuyo presupuesto no llega a cubrir este tipo de estudios que puede superar los $250 y dependiendo las especificaciones para el diagnóstico.
«Nunca debió paralizarse el resto y casi el 90% se dispuso al Covid 19», denuncia Jaime Lorenzo, presidente de la organización Médicos Unidos de Venezuela, al reiterar que es una deuda con la atención en general a la ciudadanía. «Es parte de esos errores del sistema hospitalario y colapsó otras patologías», reiteró de lo pertinente de la vigilancia epidemiológica a las enfermedades transmisibles y prevenibles.
Pide mantener el seguimiento al virus y la notificación del Ministerio de Salud acerca de las denuncias obligatorias, que pueden ser con data diaria, semanal y mensual. Tampoco se ha informado al respecto, ni de las suficientes dotaciones de insumos, mantenimiento en infraestructura y vigilancia en general, al punto que recuerda la exigencia de la Federación de Colegios de Bioanalistas de Venezuela a finales de abril de 2022 de recuperación de laboratorios debido al 88.7% de inoperatividad.
La advertencia también proviene de Huniades Urbina, secretario general de la Academia Nacional de la Medicina, al reiterar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) no ha anunciado el fin de la pandemia y se deben seguir manteniendo las medidas de bioseguridad, así como la cobertura vacunal anti covid que la Organizació
Se tiene personal preparado con epidemiólogos y enfermeras especializadas, pero debe acentuarse la vigilancia ambulatoria. Así lo recomienda Luzmila Leal, miembro de la organización Médicos Unidos, ante esos despistajes permanentes y aplicables al seguimiento en la inmunización en general para las enfermedades virales.
Considera que las campañ;as deben ser continúas y fijas en zonas foráneas, donde las dificultades llegan a empezar desde el traslado en comunidades alejadas.
«Es un hecho latente que además de ubicar los diagnósticos de patologías, se mantenga con la inmunización», señ;ala de lo imperdonable que se tengan niñ;os sin todas las vacunas, de acuerdo a su edad. También resalta esa advertencia por los riesgos de contraer polio, de acuerdo a la cobertura vacunal y de la necesidad de reforzamiento del cerco epidemiólogico que evite rebrotes.
Evitar bajar la guardia y riesgos
La tendencia es el descenso en el mundo por la alta tasa en vacunación, luego de ese pico con la variante ómicron. Venezuela también supo de sus cinco sublinajes con más incidencia entre enero y febrero de 2022. Según la bióloga Flor Pujol, jefa del laboratorio de Virología Molecular del IVIC, es un comportamiento que no debería dejar total confianza, considerando que Venezuela junto a otros países de Latinoamérica no se han caracterizado por la totalidad en inmunización.
Explica que esa caída viene de diversos factores, relacionado con la cantidad de diagnósticos diarios, menos casos en centros asistenciales, mayor atención en domicilio y hasta de acuerdo a la inmunidad.
Según Pujol, los sublinajes siguen circulando y con posibilidad de reinfección por lo que debe mantenerse el uso correcto de mascarilla, evitar aglomeraciones y lugares sin ventilación, además de cumplir el esquema vacunal completo con refuerzos.
Refiere que parte de la población ha tenido la inmunidad por reinfección y también se tiene aquella híbrida, donde se mezcla el efecto de la vacuna y el hecho de padecer el virus. «No se trata de una explicación exacta, pero probablemente hay más casos por inmunidad híbrida o se reportan menos casos en centros asistenciales», precisa la experta de esa clínica de síntomas leves, que puede confundirse con un cuadro viral y las personas optan por quedarse en casa.
La cadena de transmisión debe cortarse, siendo pertinente el cerco de esa posibilidad de casos importados con la vigilancia hasta en los accesos terrestres.
«No se sabe si viene una variante más agresiva y el riesgo de seguir mutando», advierte el infectólogo Antonio Mata González con el recordatorio a las autoridades sanitarias para seguir con la obligatoriedad del protocolo de bioseguridad y vacunación.