Luis Colmenárez | LA PRENSA DE LARA.- Han pasado 20 meses de la muerte del capitán de corbeta Rafael Acosta Arévalo, por tal motivo, su esposa Waleswka Pérez de Acosta, no ha descansado y continúa exigiendo justicia.
A través de Twitter, Waleswka se dirigió a la alta comisionada de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, cuestionando el paradero del juez militar capitán (GNB) Mickel Angarita Amezquita Pion, a quien acusa de ser uno de los cómplices de la cadena de mando y quien recibe a las víctimas con señales de tortura.
«Exijo justicia y respeto» agregó Pérez, quien además pidió a Bachelet ofrecer explicaciones ante la comunidad internacional.
«Por qué llevan a las víctimas torturadas y agonizando al mismo hospital militar «Dr. Vicente Salias» y luego lo presentan con el mismo Juez Amezquita Pion, también los dos sargentos coordinan los mismos doctores» continuó diciendo.
Acosta Arévalo murió en 2019 bajo custodia de funcionarios del Estado venezolano. Un día antes de morir, cuando iba a su audiencia de presentación, el militar no podía ponerse en pie. Cuando le preguntaron si había sido torturado por la Dgcim; el efectivo castrense asintió con la cabeza y pidió auxilio.
El cuerpo del capitán presentó evidentes signos de torturas, según información de la autopsia que se filtró para ese entonces.