Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- José Torres, secretario general de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), que agrupa a cerca de 500 sindicatos a nivel nacional congregados en 16 federaciones, asegura que tras casi un año de pandemia, el sector informal pasó a ocupar el primer lugar en Venezuela, debido a que el 70% de la población económicamente activa vive del rebusque o el emprendimiento, por la destrucción masiva del aparato productivo nacional.
«Este gobierno no tiene capacidad económica para pagar un salario como corresponde tal como lo establece la Constitución en el artículo 91 que habla que el salario debe ser equiparado como base en el valor de la canasta alimentaria que hoy ronda los 300 dólares. La realidad es que Maduro no respeta ni siquiera los parámetros internacionales para decretar el salario mínimo tal como lo señala el Banco Mundial que establecen que se considera una persona en pobreza extrema cuando gana al menos 1.90 dólares diarios, es decir 57 dólares mensuales», exclamó.
¿Por qué la CTV no se reunió con la Asamblea Nacional dominada por el chavismo en un diálogo tal como ha aceptado Fedecámaras?
No estamos en contra del diálogo, rechazamos es la manera como se ha convocado. Fedecámaras fue a esa reunión respetando las condiciones, ellos tienen que defender sus intereses luego verán si tendrán resultados. La CTV se enteró de ese diálogo por los medios de comunicación, no fuimos informados formalmente ni siquiera por el sector privado con el que mantenemos un diálogo bipartito y eso demuestra que no hay interés real de solucionar los problemas del país.
¿Los sindicatos que se reunieron con el gobierno representan a la mayoría de los trabajadores de Venezuela?
No. El gobierno cree que hablando con organizaciones que se han dividido, o con personas que incluso no representan a ninguna organización lograrán la foto a conveniencia, pero saben que es un engaño.
¿Pretende el gobierno bajarle el volumen a las denuncias hechas en la Organización Mundial del Trabajo (OIT), sobre las violaciones sistemáticas de los derechos humanos que se han cometidos contra los trabajadores en Venezuela?
Eso es evidente. Hay una Comisión de Encuesta que vino en el mes de julio 2019 y se pronunció en septiembre. Fue el pronunciamiento más contundente de la OIT en 100 años. Vinieron a corroborar las denuncias que se han venido haciendo de persecución, encarcelamiento, acoso laboral, salarios de miseria contra la clase trabajadora y eso se dejó claro en un informe de 249 páginas donde están todas las recomendaciones que el gobierno no ha cumplido. Ellos pretenden ir allá y decir que están hablando con empresarios y trabajadores cuando los diálogos son falsos.
¿Cómo debe ser esa mesa de diálogo para que la CTV acepte participar?
Esa negociación deben empezar por poner las condiciones claras para una ruta electoral precisa, verificable y con observación internacional.
¿Cuál es el balance que hace de la situación laboral en Venezuela en casi un año de pandemia?
El balance es catastrófico. Tenemos una pandemia por el coronavirus, pero también una pandemia económica y social. Tenemos una economía hiperinflacionaria donde no puede haber salario que permitan a los trabajadores la cantidad suficiente para atender sus necesidades, ni seguridad social. La pobreza de un país no se mide por los bajos salarios, la pobreza se mide además por las condiciones infrahumanas en que viven sus ciudadanos.
El salario que cobran hoy los pensionados (1.200.000 bolívares) es apenas 69 centavos de dólar al mes. ¿Cómo cataloga el nivel de miseria de los venezolanos?
El gran problema del país hoy es el ingreso de los ciudadanos que no permite tener el valor suficiente para la adquisición de bienes básicos. Hoy también tenemos el problema de la salud, los hospitales públicos no tienen la infraestructura necesaria para atender la pandemia, y eso desencadena el sufrimiento de las familias.
¿Cuál sería el salario justo para los trabajadores?
Maduro empuja a la informalidad a la población porque quebró al país. El arreglo que tiene que recibir cada trabajador podría ser 700 dólares, pero sólo hay que sacar cuentas: Hay cuatro millones y medio de jubilados, más de tres millones de empleados públicos, y 11 millones de personas económicamente activas, ¿de dónde va a sacar el gobierno 700 o 600 dólares mínimo multiplicado por esa cantidad? sin tomar en cuenta que debe hacer inversión a hospitales, escuelas y a los servicios públicos, cuando PDVSA está quebrada al igual que las empresas de minería. Tal como lo pedimos el año pasado, aquí debe haber un salario tipo ayuda humanitaria que ronde los 150 dólares al mes para mejorar las condiciones de vida, pero debe ser acordado en un diálogo tripartito y Maduro debe acudir al FMI.
¿Cuál es su posición sobre las empresas públicas que se están privatizando con total discrecionalidad?
Eso no es privatizar, eso es transferir el patrimonio del Estado y está condenado en la Constitución. Una cosa es privatizar que es llamar al sector privado y haya una inversión de recursos para poder operar más eficientemente esas empresas, pero lo que se escucha en el país son convenios con países como Rusia, Turquía, Irán.
¿En pandemia en cuánto se ubica la informalidad?
En Venezuela no hay datos oficiales ni del Instituto Nacional de Estadísticas ni de la Asamblea Nacional electa en 2015, pero hay cifras de los diferentes sindicatos que afirman que el desempleo ronda el 20% y la ocupación informal un 70%. La población económicamente activa son aproximadamente 11 millones de Venezolanos. Ahora el sector informal pasó a ser el primero en el país, pero son ciudadanos que viven de ser buhoneros o emprendedores sin protección social, ni vacaciones y comen de lo que puedan vender al día.