Agatha Reyes | LA PRENSA DE LARA.- Elecciones solo agravaran la crisis en Venezuela. La aseveración corresponde a la Conferencia Episcopal Venezolana, quienes a través de un comunicado aseguraron que los comicios convocados para el próximo 6 de diciembre, lejos de solventar la crisis política en el país la agravará.
«El evento electoral convocado para el próximo 6 de diciembre, lejos de contribuir a la solución democrática de la situación política que hoy vivimos, tiende a agravarla. Es inmoral realizar elecciones cuando el pueblo sufre las consecuencias de la pandemia, carece de las condiciones mínimas para su subsistencia, y no existe transparencia en las reglas y mecanismos de verificación que deben regir un proceso electoral» , dice el comunicado.
Indicaron que el sentir de los venezolanos es dilucidar su futuro político a través de la vía electoral, pero en elecciones que sean realmente transparentes, y en igualdad de condiciones para quienes participen en el acto sagrado del voto. «Esto implica una convocatoria a unas auténticas elecciones parlamentarias y elecciones presidenciales con condiciones de libertad e igualdad para todos los participantes, y con acompañamiento y seguimiento de organismos internacionales plurales» continúan diciendo.
En el texto condenan que actualmente tanto el gobierno de Nicolás Maduro, como la dirigencia política de oposición hagan a un lado el clamor del pueblo para poner como prioridad intereses particulares «Tanto el oficialismo como la oposición no presentan un proyecto de país que logre reunir y convencer la voluntad mayoritaria del pueblo venezolano de vivir en justicia, libertad y paz. Venezuela reclama a gritos un cambio de actitud en toda la dirigencia política. Como bien lo ha señalado recientemente el Papa Francisco, «hace falta la mejor política puesta al servicio del verdadero bien común».
Aseguran que mientras el venezolano sufre por los embates de la crisis, por la falta de servicio públicos de calidad y el deterioro del poder adquisitivo, en el país permanece un gobierno que ha demostrado su incapacidad para dar respuesta a los grandes problemas y la oposición se encuentra dividida y sin presentar una alternativa verdadera de cambio.
«Son ya conocidas las angustias y carencias que sufre el pueblo de Venezuela, desde la escasez y el desabastecimiento de alimentos, pasando por la deficiencia de los servicios públicos, hasta el irrespeto de sus derechos más elementales. Esta problemática se ha visto potenciada por el surgimiento de la pandemia del COVID-19, que va dejando su estela de dolor y muerte en todos los rincones de nuestra geografía. Son muchos los que se sienten angustiados e indefensos, sin posibilidades de enfrentar una crisis que los lleva a situaciones límites de inseguridad y precariedad personal y familiar» dice el documento.
La Conferencia Episcopal además aseguró que producto de la poca respuesta gubernamental a nivel nacional se han desarrollado manifestaciones voluntarias de una ciudadanía agobiada, misma que en medio de la falta de respuesta, muchos han decidido abandonar el país en busca de mejoras en otras naciones.
«Observamos con dolor cómo grupos de hermanos nuestros, vendiendo sus pocas pertenencias, emprenden largas caminatas desde diversas regiones para salir del país. Más que emigrar, huyen de un país que no les ofrece garantías de una vida digna. Además de sufrir los rigores del clima y del cansancio, son sometidos al menosprecio de algunos de sus conciudadanos. Empeora su situación el maltrato de las autoridades militares y policiales quienes a lo largo del camino les requisan y les arrebatan sus pertenencias y el dinero que llevan. En vez de protegerlos, como lo juraron hacer ante Dios y la patria, los vejan y los consideran como ciudadanos de segunda categoría. Estas son realidades que claman al cielo», dicen.
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