Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- «Nosotros nos hemos pasado 22 años votando y de cada elección salimos con menos. Votamos, sí pero no elegimos, porque todo ha sido fraudulento y eso está conocido interna e internacionalmente, pero tenemos que lograr que la ciudadanía reaccione». Así lo expresó Blanca Rosa Mármol de León, abogada en ciencias penales y criminalísticas, y actual representante del comité organizador de la consulta popular, que más de 100 organizaciones civiles, acompañados de la Asamblea Nacional convocaron, activando el artículo 70 de la Constitución.
¿Cómo se demostrará la participación de la gente en la consulta popular si durará del 5 al 12 de diciembre, y el ciudadano tendrá la opción de votar online?
La consulta es mixta, presencial y online. En Venezuela esperamos que predomine la presencial, pero habrá gente que no podrá asistir por diferentes razones entre ellas las limitaciones de movilización por la pandemia, y para esa gente está prevista la vía online.
¿Puede ser una amenaza creíble para Maduro esta consulta popular, por el hecho de que la movilización del país no se verá toda en un mismo día?
No sé decirte qué representa una amenaza para este régimen, porque si algo lo caracteriza es la falta de escrúpulos. Ellos han matado a nuestra gente en las manifestaciones, los han torturado, así lo registra el informe de la Misión de la ONU donde quedó establecido la comisión de crímenes de lesa humanidad. Pero más allá de eso, la idea es que podamos recabar la mayor cantidad de manifestaciones de voluntad y que haya la presencia internacional para que quede constancia de que ejercimos el último recursos constitucional pacífico, democrático y electoral, porque eso es lo que nos ha venido exigiendo la comunidad internacional cada vez que hemos acudido a buscar ayuda o auxilio humanitario.
¿Cómo explicarle al pueblo la utilidad de esta consulta cuando el 16 de julio de 2017 se realizó un plebiscito que no arrojó resultados para el país?
Basta con señalar que en esa oportunidad no se les preguntó al país si querían la salida del tirano, no teníamos un presidente encargado ni el apoyo de más de 60 países, no teníamos un dictamen de la Misión de Verificación de Hechos de la ONU estableciendo que quienes desempeñan las funciones públicas de mayor importancia comenten crímenes de lesa humanidad.
Hace tres años el país estaba volcado a la calle. ¿Cómo vencer la frustración y el desánimo que hoy arropa al 70% de los venezolanos en tan sólo 37 días que resta para la consulta popular?
Todos estamos frustrados porque este régimen ha utilizado las herramientas de la democracia para destruirla. Hemos pasado 22 años votando y de cada elección salimos con menos. Pero estoy convencida de que lograremos que la ciudadanía reaccione.
¿Cuáles deberían ser las preguntas de esta consulta?
Las preguntas que fueron elaboradas en la AN resultaron demasiados largas y poco concretas, de manera que sí hemos planteado que deben ser reformuladas.
Usted ha dicho que el propósito de esta consulta es el cese de usurpación y un gobierno de transición, ¿acaso no es contraproducente colocar dentro de las interrogantes esas palabras que fueron el mantra político que no logró sacar a Maduro en 2019?
La gente quiere que el tirano salga y que haya un gobierno interino para después poder organizar unas elecciones en las cuales pueda confiar, así esas palabras hayan pasado de ser mantra a karma.
¿Qué ocurriría si esta consulta tiene niveles de abstención altos?
Yo tengo confianza en que la ciudadanía va a participar, el incentivo es el hambre, las enfermedades, la falta de medicina, gasolina, todas las privaciones que se tienen para participar.
En los barrios, donde hay un control social, ¿Cómo se le garantizarán a quienes participen se le respete el secreto de su voto?
Va a estar garantizado el secreto del voto y una persona un voto, porque sabemos el tipo de régimen al cual nos enfrentamos.
¿Cómo brindar seguridad al ciudadano sabiendo que este es un gobierno que reprime las protestas?
Vivimos en un ambiente de represión y de terror, por eso se está gestionando la veeduría internacional. Una de las finalidades de la consulta es quitarle al régimen la careta democrática que se ha puesto durante todo este tiempo, porque este es un régimen que pretende presentarse como demócrata y por eso vivimos de elección en elección. Ahí tienen un fraude parlamentario cantado el 6 de diciembre que es inconstitucional.
¿Cuál es la viabilidad legal de la continuidad administrativa del parlamento después del 5 de enero de 2021?
Más que una continuidad administrativa es constitucional. Este parlamento que resulte producto de estas elecciones fraudulentas, pues seguirá siendo inconstitucional como todas las instituciones que tenemos hoy en Venezuela. Es la última a la cual faltaría por controlar de parte de la tiranía.
¿Y en cuanto a la presidencia interina, qué base legal tiene para seguir en 2021?
Allí hay que aclarar algo, la condición de presidente constitucional de Juan Guaidó no depende que sea presidente de la AN. Guaidó es presidente porque cuando sucedió la ausencia absoluta, él era el que estaba encargado de la presidencia de la AN, único poder legítimo que hasta ahora nos queda. En esa condición es que está encargado de la Presidencia de la República, pero cuando la AN cambie, y porque cambien la directiva de la AN eso no quiere decir que nos van a cambiar el presidente a los venezolanos, porque la presidencia de la República no se elige en segundo grado.
Es decir, ¿a partir de este nuevo periodo la presidencia interina debería estar separada de la AN?
Exactamente, Guaidó tiene que ser presidente de la República y debió haberlo sido desde el momento que se encargó y debió haberse desprendido de la presidencia de la Asamblea Nacional, esa es la realidad.