AFP | LA PRENSA.- El gobernador de Carolina del Norte declaró estado de emergencia en Charlotte este miércoles 21 de septiembre tras la segunda noche de enfrentamientos en la ciudad, desatados tras la muerte de un hombre afroamericano en manos de la policía.
«He declarado el estado de emergencia e iniciado esfuerzos para desplegar la Guardia Nacional y la Patrulla de Caminos para asistir a la policía local en Charlotte», escribió el gobernador Pat McCrory en Twitter.
Un manifestante fue gravemente herido de bala y se encuentra con respiración asistida tras un choque «entre civiles», según dijo la Alcaldía en Twitter, que añadió que la policía «no abrió fuego».
Todo comenzó cuando una manifestación pacífica, organizada contra los abusos policiales, se desbordó con actos de violencia. Centenares de manifestantes empezaron a romper ventanales y lanzar proyectiles contra las fuerzas del orden, que respondieron con bombas de gas lacrimógeno.
Los manifestantes están convencidos de que Keith Lamont Scott, un hombre afroamericano de 43 años, abatido el martes por disparos de la policía, fue víctima de un flagrante error.
Según la policía, Scott fue abatido por el agente Brentley Vinson porque se negaba a bajar su arma de fuego. Los familiares afirman que el fallecido solo tenía un libro en su mano.
La muerte de Scott, en un contexto de hechos similares en otras ciudades estadounidenses, llevó a manifestaciones la noche del martes. La movilización terminó con 16 miembros de las fuerzas del orden heridos, según la policía, y un número no determinado de manifestantes lesionados, según medios locales.