Isabella Delgado | LA PRENSA.- El incinerador de desechos biológicos del ambulatorio de Cabudare pudo ser encendido ayer, tras cuatro años de inactividad por fallas mecánicas. La reparación se logró por cooperación institucional entre el ambulatorio y la clínica privada Hospital Internacional.
Ahora será posible incinerar 300 kilos de desechos mensuales, del ambulatorio y de la clínica. Domingo Verde, director del ambulatorio, explica que en las próximas semanas se probará la capacidad logística y productiva del incinerador. De acuerdo al resultado ofrecerán el servicio a clínicas del municipio que les permitirá tener un ingreso extra con los que podrán hacer arreglos en el ambulatorio y paliar la crisis presupuestaria.
“Muchas empresas nos han colaborado. Hay que tratar de resolver en tiempos de crisis. Ahora tenemos como meta arreglar una de las dos ambulancias que tenemos, que no está operativa”, afirmó Verde, tras el acto de inauguración efectuado ayer en la mañana en la sala de incineración.