Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- «Vamos a considerar el problema habitacional de las tres casas, pero tienen que salir», es parte de lo que dice el gobernador Adolfo Pereira a través de un video en el que les pedía a tres familias que desalojaran los ranchos, que estaban construidos a orillas de la quebrada La Ruezga.
Luego de cuatro meses, las tres familias que fueron desalojadas de las viviendas, cuya estructurales fueron derrumbadas, viven arrimados pero conservan la esperanza de tener una casa propia.
Los vecinos explicaron que en el sector 4 de la Ruezga Norte existía un problema de cloacas, que poco a poco los técnicos de Hidrolara fueron solucionando, repararon las tuberías hasta llegar al punto inicial, la boca de visita que estaba justo debajo de los ranchos que construyeron a las orillas de la quebrada.
Las personas afectadas comentaron que ellos, tenían viviendo allí nueve añ;os. Se trata de tres familias, con un total de ocho niñ;os, una adolescente y tres adultos.
Puede ampliar esta información en nuestra edición impresa de este viernes 27 de octubre.