José Miguel Najul | LA PRENSA.- En Venezuela la vejez ya no es la “edad de oro”. Al contrario, su color se ha tornado de un negro intenso, remarcado por la desesperación y la impotencia de ver cómo se deteriora la salud por algo que, en otros tiempos, era inconcebible: la escasez de medicamentos.
El grupo “Lara por la vida” estima que en la entidad hay unas 207 mil personas de la tercera edad que no se están tratando correctamente las enfermedades crónicas que padecen.
Édgar Silva, vocero, especificó que las enfermedades son las típicas que acarrea la edad avanzada: diabetes, padecimientos renales, hipertensión, problemas cardíacos y cáncer.
Silva apunta que, incluso lograr una operación a corazón abierto o conseguir un riñón, logros que en otra época eran codiciados por las personas, ahora son también otro problema, porque tampoco se encuentran las medicinas que requieren los pacientes trasplantados para mantenerse estables y aceptar el órgano luego de la intervención quirúrgica.
Por eso, miembros de la organización se encontraron el sábado 27 de agosto en la plaza Altagracia para manifestar su desacuerdo con esta situación.
Tomás Angulo, dirigente, comentó que los adultos mayores deben trabajar de manera constante para conseguir soluciones, haciendo vida activa en las actividades que se están organizando.
“Necesitamos manifestarnos, de manera pacífica, pero permanente para que nuestras peticiones puedan ser escuchadas. Cada día que pasa el problema se agrava y es necesario encontrar una solución”, expresó el señor Angulo.
Elevan un llamado al gobierno nacional y les piden que “dejen de poner la política y el partidismo por encima de los verdaderos problemas de la población, que pide un canal humanitario”.