Rafael Piña | LA PRENSA de Lara.- Paradas desoladas y pocas unidades fue lo que reinó ayer en la ciudad. Los pocos rutas que circularon se aprovecharon del bolsillo de los guaros y cobraron hasta mil doscientos bolívares.
«Me monté en un ruta y le pasé 700 bolívares y me dijo que el pasaje eran mil y me bajé porque no tenía más dinero«, dijo Carlos Vásquez.
Durante la tarde se vivió el mismo panorama con pocas busetas trabajando y las paradas solas en los puntos claves de la ciudad.