viernes, 31 enero 2025
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Remodelaciones: un golpe duro al bolsillo

José Daniel Sequera | LA PRENSA.- La escandalosa cifra de 30 millones de bolívares que puede llegar a costar un trabajo pequeño de albañilería, pone en último plano cualquier tipo de remodelación o ampliación en la vivienda que era común hacer durante la temporada decembrina tras el pago de los aguinaldos.

Esta cifra equivale a 66 sueldos integrales, que desde el primero de noviembre se encuentra 456 mil 507 bolívares, por lo que las personas que ganen sueldo mínimo más cestaticket, tendrían que esperar al menos cinco años y seis meses para alcanzar ese monto.

Jesús Sandoval, vecino del sector Santos Luzardo, dice que él pretendía hacer unos arreglos en el frente de su casa, pero cuando le dieron el presupuesto decidió dejarlo así. “Yo quería colocar caico en el frente de mi casa, pero cuando me dijeron que sólo la mano de obra por metro me iba a salir en 40 mil bolívares, no pude hacer nada”, precisa con tristeza.

Y es que los montos para hacer los arreglos varían tanto por el albañil como la envergadura de la obra. Por ejemplo, el metro cuadrado de pared en bloques grises con mano de obra incluida, podría costar fácilmente 150 mil bolos, mientras que una pared con bloques rojo roza los 180 mil bolívares.

Estos se quedan cortos si alguien quiere remodelar un baño, porque sólo una poceta puede costar 7 millones 50 mil bolívares mientras que un lavamanos está por los 85 mil bolivitas.

Más allá de lo caro que puedan estar los insumos, los encuestados aseguran que la inflación es el mayor enemigo. Mary Rivas, ama de casa, asoma que los precios aumentan todos los días y es imposible pensar en los arreglos de la casa.

“Los precios los suben casi a diario, entonces ¿cómo puede hacer una persona que quizá tenga la plata de sus aguinaldos para un día pero para el siguiente no le alcanza?, es muy complicada esa situación”, exclama.

Pero el arreglo al que más le huyen las personas, y esto fue corroborado por el albañil José Bueno, es el techo: manto, placa o machihembrado salen tan costosos que incluso para quien devenga un salario que cuadriplique un sueldo íntegro, se le hace bien cuestarriba costearlo.

“Cuando uno le dice al cliente que sólo un manto puede costar 800 mil bolos, lo piensan dos veces, porque en casi todos los trabajos, se necesitan al menos cinco o seis rollos, y el gasto sería bien alto”, apunta Bueno sin miedo a contestar que su trabajo se ha venido abajo por falta de clientela.

Con verdes hacen alguito

Aunque para ellos sigue siendo igual de caro, los que han tenido la oportunidad de salir del país para trabajar en el exterior, son los que tienen las posibilidades económicas de hacer el tan anhelado “cariñito” a sus casas.

Hernán Jiménez, ingeniero de software que trabaja en Perú, reporta que como vende dólares en el mercado negro, eso le da la capacidad de remodelar tanto su casa como la de su mamá.

“Yo gracias a Dios tengo la oportunidad de poder trabajar en el exterior y ganar en dólares, además de tener la capacidad de poder venir a Venezuela regularmente para ver los avances de las obras, porque sino no tendría ni para echar dos metros de caico”, relata Jiménez.

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