Osman Rojas | LA PRENSA de Lara.- Lo que antes era basura ahora es comercializable. Da igual si se trata de productos que requieren algún nivel de higiene personal como un plato o tenedores, o si es algo tan desechable como una botella, todo es vendido en las calles o reutilizados para hacer arte o elaborar juguetes.
Artesanía, pinturas en discos de acetato o carritos o figuras hechas con potes de Coca Cola son algunos de los productos que se pueden encontrar en las calles. «El ingenio es algo que sale a relucir en momentos como estos. Nada se pierde porque todo es comercializable. Hasta las botellas de cerveza se venden», comenta el señor Andrés Torrealba, vendedor de artículos usados en el centro de la ciudad.
Lo que más sorprende del reciclaje que se está haciendo en la ciudad es la salida de estos productos, pues las personas aseguran que es mucho más barato comprar a los vendedores callejeros que ir a una tienda. «A mí me gustan las pinturas y cuando uno pregunta en las calles los cuadros no se bajan de 150 mil bolívares. En las calles se encuentran hermosas pinturas en 5 o 6 mil bolívares», dice Yesica Fonseca, ama de casa que asegura que semanalmente recurre a los «chatarreros» para ver qué consigue. «Hasta juguetes para el nieto compré aquí», señala.
La venta de productos usados no es nuevo, pues desde hace años se ven en las calles a personas que venden ropa de segunda mano; sin embargo, en estos momentos es sorprendente ver cómo las calles del centro de la ciudad han sido invadidas por comerciantes que utilizan su creatividad para convertir en producto comercializable lo que hasta hace poco era basura.