Osman Rojas | LA PRENSA.- Llegó al Hospital Central fingiendo un dolor y cuando se metió en la Emergencia burló la seguridad hasta subir a cuarto piso. Allí encontró a un paciente e intentó apuñalarlo.
Esa escena se vivió este domingo en el Antonio María Pineda, confirmando una realidad que todos en la institución conocen: al hospital le hacen falta policías.
Marcial Daza, director de la institución, hizo un llamado a las autoridades regionales y nacionales para que tripliquen los cuerpos de seguridad en la institución pues, según palabras del médico, la inseguridad ya no se aguanta.
“No sólo fue el intento de asesinato, también nos robaron un aire acondicionado y eso ya es habitual”, denunció.