María B. Jordán | LA PRENSA de Lara – «Los que sufrimos somos los que no tenemos internet o un celular inteligente«, es lo que comentan los representantes quienes tienen hacer maromas para poder cumplir con las clases a distancia.
Pedir prestada una computadora donde un vecino, utilizar cyber, llamadas, o Facebook, son algunas de las modalidades que utilizan los representantes para estar informados de las asignaciones que les envían a sus hijos y para poder enviarlas.
Los directivos de las instituciones aseguran que ellos están al tanto que no todos los representantes cuentan con los recursos tecnológicos para poder enviar las tareas desde sus casas, pero para eso también están creando los portafolios que deben ser evaluados cada 15 días y así llevar no sólo el registro que puedan enviar, sino también tenerlo en físico.
«Sabemos que el internet es inconstante y entendemos a quienes no tienen, y a algunos los tenemos que llamar», dijo Marilin Rodríguez, docente de una escuela al oeste.
Elizabeth Betancourt dijo que tienen pensado colocar una cartelera en la entrada de la escuela, para que los representantes puedan saber cuáles son las asignaciones cada semana con su debida explicación
Jazmín Castillo, quien tiene un hijo en la escuela, dijo que a ella a veces le da dolor de cabeza por estar quitando prestado a los vecinos, o buscando wifi en cualquier lado para poder estar al día con las asignaciones.
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