Osman Rojas | LA PRENSA.- Los enfermos en Venezuela no aguantan la crisis. La marcada escasez de medicamentos que hay en el país obliga a los pacientes a buscar vías de escape para salvar sus vidas encontrando en Colombia una alternativa más que interesante.
Según los números que maneja el grupo médico Lara Entera por la Salud, en los últimos ocho meses, más de 6 mil venezolanos han migrado al país cafetero en busca de los tratamientos para salvar sus vidas. Bogotá, Cúcuta e Ibague son los destinos de estos enfermos.
Pacientes oncológicos y portadores del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) son los que viajan con mayor frecuencia a Colombia.
“Quedarse en Venezuela es morir. Aquí no hay medicinas de ningún tipo y eso nos está matando”, dijo Édgar Arias, director de la fundación Hombres SeroPositivo en el estado. El informante explicó que de 27 fármacos necesarios para combatir la enfermedad, en Venezuela sólo se consiguen tres.
Tan dramática es la situación para los pacientes con VIH, que ahora mismo hay cinco pacientes hospitalizados en el Antonio María Pineda, mientras que el Hospital Pediátrico tiene a tres pequeños internados que están pagando por la escasez de medicamentos.
Lo que más nos indigna es la apatía que han mostrado las autoridades para con nuestro caso. Nadie se preocupa por lo que nos pasa y eso es indignante”, resaltó Arias.
El pasado fin de semana, la doctora Linda Amaro, viceministra de salud, dijo que a los enfermos con VIH le habían llegado sus tratamientos. Esta información fue desmentida por los mismos afectados, quienes aseguraron que la Dirección de Salud los había marginado.
Nos hemos cansado de esperar. Estamos desesperados por salvar nuestras vidas y lo peor es que nadie hace algo para ayudarnos. Los que pueden se van del país y eso no se puede juzgar porque cuesta mantenerse con vida en Venezuela”, dijo Arias con impotencia.
Situación parecida es la que atraviesan los enfermos con cáncer. Desde que arrancó el año, el Seguro Social, institución encargada de entregar los tratamientos quimioterápicos en Venezuela, ha presentado retraso significativos en la distribución de fármacos.
Tan grave es el panorama con los pacientes oncológicos que, en las últimas tres semanas, el Seguro Social Pastor Oropeza ha optado por devolver las carpetas de nuevos ingresos porque no hay manera de darle oportuna respuesta.
“El Seguro Social sólo entrega solución fisiológica y jeringas. La situación de los pacientes con cáncer es realmente dramática porque nuestra enfermedad no espera. Hace poco enterré a un amigo que no tenía cómo aplicarse las quimioterapias”, dijo Víctor Martínez, paciente oncológico.
El afectado confiesa que él no se ha podido realizar ningún ciclo de quimioterapias porque no encuentra los medicamentos necesarios. De hecho, el paciente ni siquiera ha terminado sus radioterapias porque el dinero se le acabó hace un mes.
“Yo estoy condenado y con todo el dolor de mi alma lo digo. El Gobierno ha quedado a deber y por eso hay muchos que prefieren irse para Colombia. Allá sí garantizan la vida”, sentenció.