León/Giménez | LA PRENSA.- La navidad para los católicos es un tiempo de encuentro, no solos con familiares y seres queridos sino con ellos mismos. Es un momento para reflexionar sobre la vida para lograr obtener ese “regalo” de navidad que todos buscan: vivir el misterio de la natividad.
Hoy es víspera de Navidad, todos en casa nos preparamos para recibir o conmemorar el nacimiento del Niño Jesús, el Mesías; sin embargo pareciera que a muchas personas se les ha olvidado en verdadero significado de estas fechas, pues el no tener para celebrar como hace unos años atrás borrara este día por completo.
Para el Padre Jesús Genaro Pérez mejor conocido como “Chulalo” la Navidad es más que regalar objetos materiales, gastar miles de bolívares en comida y bebida. Para Chulalo lo más importante es regalar la presencia a tus seres queridos; es decir compartir y aprovechar el tiempo al máximo, dar gracias a Dios por los recibido y las lecciones aprendidas.
Con el pasar de los años la fiesta se ha ido degradando, pero la crisis actualmente la ha cambiado y las ha vuelto más “depresivas”. Para el padre Juan Ignacio Franceschi, arcipreste y párroco de la iglesia María Auxiliadora, esos estados de ánimo no deberían existir en el corazón del cristiano.
“La gente dice que no hay ambiente y ánimo navideño por la falta de hallacas, pan de jamón, ponche de crema y demás. Pero no se necesitan de esas cosas para celebrarlo como se debe”, aseguraba el padre Juan Ignacio en una de sus homilías durante la misa de aguinaldo.
Para los sacerdotes hay que rescatar los valores familiares. Refieren que no es justo perder el tiempo en quejarse por lo que no se pudo poner en la mesa y lo que no se obtuvo durante el año, sino que lo mejor es mejor agradecer por lo que si se tiene, la familia.
“Así como Jesucristo que en la primera navidad, desprovisto de grandeza, se regaló a sí mismo en un establo prestado y nació en un pesebre, tu también debes ser el regalo para quienes te aprecian”.
Conectan con Dios
Las misas de aguinaldos, son dedicadas a la familia. Para que cada miembro pueda sentir el verdadero significado de la navidad y ver la importancia de lo espiritual, el amor, los seres queridos sobre lo material.
Según el padre Juan Ignacio, las misas de aguinaldo de este año se conectan con la Divina Pastora a través de la “ruta de las bienaventuranzas”.
Pues la arquidiócesis pidió que para la visita 162 se vaya realizando con antelación una catequesis que ayude a mantener la procesión lo más conectada con la religiosidad posible.