LA PRENSA.- Las calles de la ciudad crepuscular, Barquisimeto, amanecieron este miércoles 26 de octubre tomadas por estudiantes y simpatizantes de la oposición que acuden al llamado de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) por la “Toma de Venezuela” para exigir sus derechos luego de la suspensión de la recolección del 20% de manifestaciones de voluntad para el referéndum revocatorio.
Se concentraron desde tempranas horas de la mañana en las adyacencias de la plaza Macario Yépez en defensa de la democracia. Desde allí el el alcalde Alfredo Ramos denunció que el gobierno desconoce la voluntad del pueblo y que se enfrentan a gente que no tiene “palabra”. Alega que el único diálogo que debe haber es restablecer el referendo revocatorio.
Ramos anunció que los jueces de seis estados donde se anuló el 1% de firmas para activación del revocatorio han sido denunciados ante la Corte Penal Internacional por violación a los derechos humanos.
“El pueblo no tiene miedo, le decimos a Maduro, a su cúpula corrupta y el ministro Padrino López que no nos detendremos ” expresó
Por su parte José barreras, declaró que “cuando el gobierno quería acabar con el revocatorio pensé en el pueblo, en los enfermos”.
Oficialismo también marchó
Aquí hay un pueblo consciente que sale a la calle para pedir por la paz de Venezuela y ofrecer su apoyo incondicional al proceso revolucionario comandado por Maduro, así lo expresó Luis Jonás Reyes, quien estuvo encargado de dirigir la concentración oficialista que se realizó en la redoma de El Obelisco.
El miembro del buró político regional indicó que salieron a la calle en los nueve municipios de la entidad con la más grande disposición de paz, sin violencia, pero alertas ante cualquier acción “desestabilizadora” que pudieran estar generando actores de la oposición, al menos de un sector, que él denomina como el “ala violenta de la derecha”.
“Hay un pueblo que aprendió de la lección del golpe de Estado del 2002. Estamos resteados en la defensa del presidente Nicolás Maduro”, enfatizó Reyes Flores, quien señala que lo más peligroso que puede haber es una oposición dividida y sin un liderazgo que canalice sus acciones.
El diputado al CLEL ve con preocupación que un sector de la MUD haya pateado la mesa con el diálogo propuesto por el Vaticano. “Ese es el sector que quiere violencia, que quiere una salida que no está establecida en la Constitución”.
Confirma además que se sumarán a acciones de calle lo que resta de semana con la activación de los puntos rojos.