William Croes | LA PRENSA.- Librar a los niños de las colas y del bululú es la petición que les hace la dirección del Saime a los padres. El organismo tiene destinado los sábados para que los chamos se saquen el documento de identidad por primera vez y así no exponerlos entre semana, cuando hay una mayor demanda de adultos.
Entre julio y septiembre es la temporada para que los niños con 9 años cumplidos se saquen su primera cédula de identidad, por ser un requisito que les exigen en la inscripción de escuelas y colegios. Los padres amanecen con los niños en las colas afuera de las oficinas del Saime, y esto es lo que quiere eliminar el organismo.
“Habilitamos cinco oficinas en el estado los sábados especialmente para los niños”, expresa Jhoan Hernández, director regional del Saime, quien argumenta que cada oficina tiene capacidad de tramitar 300 documentos, para un total de mil 500 cédulas cada fin de semana.
Hernández señala que el proceso es relativamente rápido y demora entre 10 a 15 minutos. El niño entrega su partida de nacimiento, el inspector del CNE la revisa, toma sus datos y luego le sacan la fotografía, lo que más demora es que le entreguen la cédula que es un promedio de 30 minutos.
“Es lo que más tarda. Mi hijo duró como 10 minutos en el registro, pero para que la entreguen ha costado”, expresa Xavier Colmenárez, un representante que llegó bien tempranito con su hijo que va a tramitar el documento por primera vez, porque tiene sus nueve años cumplidos.