Osman Rojas | LA PRENSA.- Bajando la cabeza por la impotencia y cargando a su pequeño bebé de 15 días de nacido, salió Miguel Vargas de la consulta externa del Hospital Pediátrico. Vargas, de 33 años de edad, es oriundo de Valencia y desde la semana pasada anda recorriendo los hospitales de centroccidente para hacerle la prueba de talón a su hijo, pero en ninguna parte hay reactivos.
“Parece una pesadilla lo que estamos viviendo. El jueves pasado agarré a mi hijo y me fui a Maracay para hacerle la prueba de talón a mi bebé, pero no tenían reactivos y de allá me mandaron para San Felipe y ahí tampoco había y me dijeron que lo buscara en Barquisimeto, pero aquí tampoco tienen para hacerla”, lamentó Vargas.
El problema con los reactivos para revelar la prueba que detecta si el niño tiene enfermedades metabólicas congénitas como el hipotiroidismo o la hemoglobinopatía, empezó en el mes de junio cuando el Ministerio de Salud dejó de enviar los químicos.
Maite Juárez, jefa del Servicio de Atención Pediátrica, cuenta que el problema con los reactivos es a nivel nacional y que en ninguna parte del país se está realizando el test infantil.
“Cada día llegan padres para hacerle la prueba de talón a su hijo y no podemos darle una respuesta. De verdad es sumamente preocupante la situación porque el test sirve para ver si el niño tiene problemas cerebrales o neurológicos y lamentablemente el Gobierno nacional se ha olvidado de abastecer a los hospitales”, aseguró Juárez a La Prensa.
La preocupación en los padres crece y es que sólo en los hospitales de la red pública se realiza este examen. Manuel Castro, médico pediatra, calificó como una “barbaridad” el descuido del Ministerio en cuanto a la dotación de insumos y reactivos y pidió mayor seriedad para abordar los problemas de salud pública.
“Los niños no pueden sufrir por la crisis. Es inhumano que se lleguen a estos niveles. Hay que tener en cuenta que las enfermedades diagnosticadas a tiempo son tratables, pero a ellos (Gobierno nacional) no les importa eso”, concluyó Castro.