Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.-& ;Lo colorido vibra en la comunidad San Benito, con sus calles teñidas de murales, grafitis y esa inmensa emoción por la XIII Válida de Carritos de Rolineras. Los vecinos se unen para hacer más llamativo a este sector y la adrenalina recorre las venas de los participantes en este juego tradicional envuelto en lo urbano. Este domingo será la antesala al conocer a la madrina y el domingo desde las 10:00 am se encenderá la calle principal para concluir con música en vivo.
A las 6:00 pm será la elección de la madrina de esta carrera, donde 20 candidatas en edades comprendidas de 8 a 15 años, aspiran alzarse con la banda de la soberana de esta válida 2023.
Es todo un festín dominical, con las raíces de la urbe. Una bajada de 180 metros, en todo momento inclinada e incluyendo varias curvas. Los gritos de los vecinos y visitantes, serán los detonantes para acelerar las palpitaciones de los 13 participantes de este año, quienes reconocen estar inmersos en la locura para lanzarse en este trayecto y teniendo como meta, no superar los 30 segundos para alcanzar la meta. Pocos han tenido este privilegio, ante curvas que implican ese reto del derrape y tratando de no perder tiempo, para poder romper el récord de 26 segundos del ganador en la cuarta válida.
Jonathan Chacón, es el productor general de este encuentro que busca el rescate de la importancia de los carritos de rolineras, esos que inicialmente eran elaborados en tablas y dirigidos por un mecate. Pero que se han transformado en varios modelos a base de material de reciclaje, como latas y pipas que perfeccionan el ajuste de la dirección y todo el sistema de las rolineras para más velocidad. Hay diseños cerrados y unos parecidos al monoplaza.
Cada carrito lleva dos tripulantes, el «piloto» que va manejando y el «motor» que va detrás, con la tarea esencial de ayudar a dirigir y mantener la estabilidad del vehículo. Estos veteranos reconocen que el «motor» es un componente esencial para triunfar con éxito. La seguridad es garantizada con más de 100 cauchos dispuestos a las orillas, a manera de barrera y la ubicación de 6 jefes de pistas en los lugares más difíciles.
Franco Arenas es un muralista y agradece el apoyo de instancias gubernamentales, por ese embellecimiento que dejan a la comunidad, teniendo la mano de obra de los vecinos. Todos colaboran, incluso con hidratación o comida a quienes trabajan. «Este año pintaron motivos religiosos, dirigentes vecinales y grafitis», precisa señalando el mural de San Benito con tres metros de alto, muy cerca de la cancha del barrio.
El trabajo es continuo y así lo señala Juan Sequera, como el herrero dispuesto desde su taller para la fabricación, remodelación y mantenimiento de los carritos. Es uno de lo miembros fundadores, satisfecho por esta oportunidad para la sana distracción, siempre complacido por la recolecta de hierro, rolineras y demás piezas. A medida que la rolinera es más pequeña, mayor desarrollo de velocidad.
«Si no eres loco, no te lances», es el lema que recuerda el piloto Luis Sierralta, por el desarrollo de la velocidad y riesgos en las curvas, la experiencia de la maniobra y cumplir con todo el sistema de protección. Defiende su escudería «La Pipa».