Osman Rojas D. | LA PRENSA DE LARA.- La falta de pruebas rápidas para diagnosticar el coronavirus los obliga a ahorrar. Según pudo confirmar el equipo periodístico del diario LA PRENSA de Lara si una persona quiere ir a un consultorio a practicarse un test para descartar la COVID-19 deberá presentar al menos tres síntomas.
Según explican en los centros asistenciales esto lo hacen para estirar las pocas pruebas que tienen pues en la calle hay un virus que es similar a la COVID-19. «Mucha gente viene por tos y fiebre y quieren que se les practique la prueba pero humanamente no podemos hacer eso. La demanda es muy alta y por eso le pedimos a las personas que tengan un poco de conciencia«, decían desde el CDI ubicado en la avenida Fuerzas Armadas.
El personal sanitario explica que uno de los síntomas que deben tener las personas es problemas para respirar. La ausencia de gusto y olfato es otro parámetro importante para medir la carga viral de una persona. «Por lo general le pedimos a las personas que vengan si tienen esos síntomas. Nos parece muy ilógico que la gente quiera hacerse la prueba por tener diarrea», señala.
De igual manera desde la institución señalan que no hacen pruebas para que las personas puedan volver a sus trabajos. En los últimos días, por medio de las redes sociales, hay trabajadores quejándose porque en ninguna parte hay pruebas rápidas. Dicen que se las exigen para poder reincorporarse a sus puesto de trabajo pero en los CDI no las están aplicando.
«Esto no es una validación de seguros. Si las personas tienen síntomas y los pasan para qué van a venir a hacerse una prueba. Lo lógico es que cuando se tenga malestar la gente vaya a un centro centinela», apuntan desde la institución.
La escasez de pruebas rápidas ha generado molestias en el gremio médico. José Félix Oletta, exministro de salud en Venezuela, se ha quejado en reiteradas ocasiones por esta situación señalando que la población está indefensa ante el virus.
«No hay información sobre lo que está pasando en Venezuela y la información que está dando el Gobierno sólo se la creen ellos. Estamos en un momento bastante delicado porque ni siquiera el gremio médicos sabe cuántas pruebas hay en estos momentos en Venezuela. Desconocemos cuál es el método de diagnostico», decía en días pasados.
Rody Navarro, médico emergenciólogo, también se ha pronunciado por esta situación. Señala que hay un desconocimiento de cómo y cuándo pueden las personas aplicarse una prueba rápida. «Lo que más preocupa es el crecimiento exponencial de la enfermedad. Hay regiones como Palavecino que han tenido un repunte significativo», dice.
Ante esta situación los médicos a nivel nacional hacen un llamado a las autoridades gubernamentales para que se pueda solventar esta situación pues ven injusto que a las personas les condicionen la aplicación de pruebas rápidas.